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El Grupo Municipal de VOX Chiclana ha señalado que "celebra que los problemas silenciados” de la plantilla del servicio de ayuda a domicilio se hayan “sacado por fin a la luz”, tras la ratificación pública por parte del comité de empresa de todo lo denunciado por la formación.
El portavoz en Chiclana, Manuel Vela, afirma que “nuestro objetivo es que se solucionen los problemas de las trabajadoras, por lo que nos alegra que ahora los sindicatos hayan decidido seguirnos para denunciar la situación que están sufriendo; la prioridad es que el Ayuntamiento, del que depende el servicio, facilite soluciones”.
El edil indica que “lejos de entrar en polémicas vacías, lo fundamental es que hemos metido en agenda sus problemas”, al tiempo que lamenta que “el miedo impida denunciar este tipo de situaciones y ataques a los derechos de los trabajadores, en este caso, fundamentalmente mujeres”.
En este sentido, Vela manifiesta que “si nuestra denuncia ha servido para abrir la puerta a que puedan mejorar sus condiciones, nos damos por satisfechos. El Gobierno local de PSOE e IU no puede mirar para otro lado, porque los derechos de los trabajadores no se están defendiendo ni respetando bajo su mandato en un servicio municipal”.
Para VOX Chiclana, el servicio de ayuda a domicilio, que se ofrece a través de la empresa municipal Emsisa, “es fundamental para garantizar la atención de muchos chiclaneros permitir la conciliación familiar y laboral. Se trata de facilitar y permitir un día a día digno a las familias y a las personas que se atienden, dignidad que merecen también estas mujeres trabajadoras a la hora de desarrollar su importante labor”.
La mejora de las condiciones laborales de la plantilla es el propósito de VOX Chiclana. Las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar está entre las quejas principales, debido a la organización de los servicios. A esto se suma el plan de disponibilidad, que les obliga a estar de guardia ante cualquier necesidad que pueda surgir; el débito horario, es decir, la horas que se dejan a deber a la empresa si un servicio no se puede hacer; además del uso de vehículos particulares y la reclamación de contar con uniformes adaptados a las necesidades del servicio, “cuestiones que se han encargado de ratificar los sindicatos tras nuestra denuncia”.
