El nuevo organigrama de la delegación estará coordinado desde el gabinete de la alcaldía. Ariza anunció asimismo que los nuevos cambios van a suponer una dinamización en el personal de la delegación para cumplir los objetivos marcados.
Por otro lado, la alcaldesa manifestó que el pago de las ayudas sociales atrasadas, un compromiso adquirido con los sindicatos, se iba a hacer firme antes la próxima nómina.
El portavoz de UGT, Manuel Andrades, señaló el pasado mes de julio que desde el colectivo de trabajadores municipales se tenía la esperanza de que la situación de cobro de nóminas dentro del plazo estipulado continuara estable en el futuro, añadiendo que para ellos el cambio en la alcaldía había sido positivo en el sentido de que “los recortes que el mes pasado afectó a unos 80 trabajadores, han sido devueltos en su totalidad tras alcanzar un acuerdo con la alcaldesa”.
Informó Andrades que quedaba pendiente el compromiso de ingresar 40.000 euros de temas sociales, por lo que desde el sindicato esperaban que se abonasen en un breve plazo.
“Ha sido una lucha larga y estamos satisfechos tras la etapa de incertidumbre que hemos vivido”, señaló.