La causa por fraude y blanqueo de capitales abierta al exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato en un juzgado ordinario de Madrid ha llegado ya a la Audiencia Nacional, concretamente al Juzgado de Fernando Andreu, que ya le investiga por los casos "Bankia" y "tarjetas black" y que ahora deberá decidir si lo asume.
Fuentes jurídicas han explicado este viernes que el testimonio de la causa, que abarca seis tomos, se ha remitido al Juzgado Central de Instrucción número 4, cuyo titular decidirá si existe conexidad entere esta investigación que le ha remitido el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid y las que ya se investigan en este órgano.
El juez Andreu, actualmente de vacaciones, puede devolver el caso a reparto si no aprecia dicha conexidad o bien asumirlo. Si vuelve a reparto será asignado de forma aleatoria a alguno de los seis juzgados centrales de instrucción, incluido el suyo.
El pasado 7 de agosto el juez número 31 de Madrid se inhibió en favor de la Audiencia Nacional para que fuera éste órgano el que siga investigando el asunto tal y como había propuesto la Fiscalía Anticorrupción.
CUESTIÓN DE COMPETENCIA
Anticorrupción le había pedido que la causa contra Rato y su asesor fiscal Domingo Plazas por delitos fiscales y de blanqueo de capitales sea llevada por la audiencia al existir indicios de la comisión de delitos cometidos en el extranjero, concretamente blanqueo de capitales relacionados con la inversión en un hotel de Berlín.
Este mismo departamento se opuso a dicha inhibición cuando la solicitó el propio juez Serrano-Artal el pasado mes de abril, al no creer que la investigación tuviera que ver con el caso Bankia que ya investiga el juez Fernando Andreu. Ahora pide que el asunto lo lleve la Audiencia Nacional, sin especificar el juzgado.
En su escrito, Anticorrupción señalaba ahora sin embargo que, como resultado de un informe remitido por la ONIF al Juzgado el 21 de julio pasado -un día antes de ser citado Rato a declarar, si bien se negó a hacerlo-, han surgido nuevos datos indiciarios de la comisión de un presunto blanqueo cometido en el extranjero, resultante de las inversiones efectuadas por Rato, mediante la sociedad alemana Bagerpleta GmbH, propietaria de un hotel en Berlín, de la que el exmandatario ha sido administrador hasta abril de 2015.
Considera la Fiscalía, y el juez Serrano-Artal ha aceptado, que las inversiones en dicha sociedad alemana se habrían llevado a cabo a través de la sociedad KRADONARA, SL, cuya matriz es la sociedad británica Vivaway Ltd, propiedad, a su vez, de Rato. Añade que los flujos de dinero que Kradonara ha remitido a Bagerpleta GmbH entre 2011 a 2014 tienen un presunto origen ilícito, dimanante de delitos de corrupción entre particulares y delito fiscal.
Se trata de la segunda ocasión en la que se discute si debe ser la Audiencia Nacional la que investigue por este asunto a Rato, quien ya tiene diligencias abiertas en dicha sede judicial en los casos 'Bankia' y por las tarjetas 'black' utilizadas por los directivos de dicha entidad. Ambas causas son instruidas por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4, Fernando Andreu.
Por el momento, el instructor de la causa en los juzgados ordinarios descartaba la existencia del delito de alzamiento de bienes que la Fiscalía procedió contra él junto con otros cinco contra la Hacienda Pública y otro de blanqueo de capitales. Únicamente ve "perfilado" el delito fiscal y no se pronuncia sobre éste último.