José Pérez Herrera, entrenador del Xerez DFC, salía a rueda de prensa tras la victoria frente al Panadería Pulido en Chapín. El técnico destacaba que “el resultado era lo más importante hoy. Dijimos en la previa que el principal rival que teníamos éramos nosotros mismos. Veníamos de una dinámica que nos había restado en autoestima y confianza. Hemos pasado una semana de muchas dudas y seguramente iba a pesar en los inicios. Teníamos respeto al rival que venía en dinámica ascendente. Sabíamos que no iba a ser fácil. Había muchas connotaciones que podían volverse en nuestro equipo y estamos muy orgullosos de los nuestros”.
“Quizás con el 1-0 ha aparecido la sensación de querer proteger el resultado cuando tendríamos que ir a por el segundo. Las sensaciones en cuanto a juego de la primera parte se disiparon tras el gol. En la segunda parte hasta el penalti ha sido un acoso y derribo constante. Ese penalti nos podría haber dado tranquilidad y fallar ese penalti ha sido el punto de inflexión para que aparezcan los fantasmas y las dudas. Hemos tenido ciertas ocasiones a la contra. Hemos tenido quizás un sabor amargo en cuanto a juego al final”, añadía.
La afición no se ha ido del todo contenta “quizás por las últimas sensaciones y nosotros no queremos sufrir tanto. Con el 2-0 habríamos estado más tranquilos. La gente estaba contenta hasta el penalti y es una realidad que no hemos terminado con tanta sensación de acoso y hay que respetar que la afición no esté contenta. Si a alguien teníamos que superar era a nosotros mismos y el equipo necesitaba ese apoyo moral si aparecían dudas”.
“El gol ha sido en el minuto 6 y antes tuvimos otra clara”, decía el entrenador azulino. “Si no hubiera llegado esa jugada el equipo habría seguido buscándolo. El encontrarlo tan pronto te genera la sensación de proteger el resultado. La intención desde inicio era cerrar el partido lo antes posible, pero el jugador en ese momento no quiere arriesgar tanto y quizás nos equivocamos en esa primera parte. El equipo ha tenido altibajos dentro del partido y lo importante era conseguir los tres puntos, dejar la portería a cero y dar un paso en la clasificación”.
Al equipo le cuesta hacer gol, aunque “las ocasiones se generan. Falta que en vez de que el portero la pare nos entre y nos quitemos el peso de encima. Siempre nos vamos con el último sabor amargo. Queremos irnos contentos y plenos de haber hecho un partido completo. El equipo lo busca, lo quiere y lo genera. Tenemos que seguir buscando la dinámica de no necesitar tantas ocasiones para que entren”.