La Dirección General de Tráfico (DGT) ha detectado en una semana a 3.155 conductores -450 cada día- que circulaban tras haber ingerido alcohol o drogas en una campaña especial de vigilancia en la que los agentes de la Guardia Civil controlaron a 173.118 conductores.
Según recuerda la DGT, los controles preventivos siguen demostrando su eficacia, ya que un 84% de positivos en alcohol y un 88% de los de drogas se han detectado en ellos, frente al resto que se detectan tras un accidente, una infracción o por presentar síntomas.
En el caso del alcohol, de los 1.603 conductores que dieron positivo, a 235 se les han abierto diligencias y han sido puestos a disposición judicial bien porque conducían con una tasa superior a 0,60mg/l en aire o bien por negarse a las pruebas de alcoholemia.
Además, se ha contabilizado también un total de 4.300 conductores que no superaban la tasa máxima permitida pero que sí conducían tras consumir alcohol. De ellos, la mayoría (3.612) fueron detectados de forma preventiva, pero otros 369 lo hicieron tras cometer una infracción, 37 después de un accidente y 3 por presentar síntomas.
Respecto a las drogas, de los 1.552 conductores que dieron positivo en alguna sustancia, la mayoría (1.141) lo hicieron por cannabis, seguidos de los que lo hicieron por cocaína (514), anfetaminas (180) y opioides (65).
Además, 20 conductores fueron puestos a disposición judicial por conducir bajo la influencia de sustancias psicotrópicas o negarse a que se les practicara un test de drogas.
