La Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) ha celebrado este miércoles su asamblea general anual, avisando su presidente, Miguel Rus, de que en este escenario de "brutal" crisis socioeconómica a cuenta de la pandemia de coronavirus Covid-19, "las empresas sevillanas no pueden soportar una cuarta ola" del virus con las consiguientes restricciones, augurando que las cifras de paro "van a ir a peor" y reclamando "estabilidad jurídica y política" para favorecer la recuperación.

Durante su intervención en la asamblea general anual de la CES, Miguel Rus ha tenido palabras para las víctimas mortales de la pandemia y sus familiares y allegados, centrando su discurso en las "terribles consecuencias humanas, económicas y sociales" de la crisis desencadenada por el coronavirus Covid-19, cuyo impacto ha sido "brutal" en la socioeconomía global, española, andaluza y sevillana.

Y es que la nueva crisis derivada del virus y las restricciones promovidas para impedir su propagación y el consecuente incremento de contagios y muertes, según ha expuesto, ha afectado especialmente a los autónomos, Pymes y micropymes, que en el caso de Andalucía y Sevilla abarcan entre el 95 y el 97 por ciento del tejido productivo, tratándose además del sector económico "más vulnerable" ante los escenarios adversos.

En ese sentido, Miguel Rus ha recordado que sectores estratégicos de la provincia de Sevilla, como los del turismo, la aeronáutica o la hostelería, están "muy tocados", todavía con "restricciones muy fuertes" y acusando las consecuencias de la parada de la actividad.

Como ejemplo, ha señalado las empresas del sector turístico sevillano, que de situarse "a la vanguardia" en su campo antes de la irrupción del virus siguen "prácticamente paradas" cuando ya transcurrido más de un año ya desde la declaración del primer estado de alarma. En el caso de las agencias de viaje, según ha precisado, su actividad se ha derrumbado hasta "un 95 por ciento", lo que le ha llevado a recordar que son muchas las empresas que "no han podido volver" a reanudar su actividad.

Se trata, así, de "una crisis sin precedentes que amenaza los cimientos del estado de bienestar", según ha alertado Miguel Rus, quien ha señalado que la escalada del paro a cuenta de las restricciones arroja "cifras inasumibles". En concreto, la provincia de Sevilla contabilizaba el pasado mes de febrero 232.847 parados registrados frente a los 193.469 que contabilizaba en febrero de 2020, justo antes de la irrupción del virus, y actualmente 26.172 empleados de la provincia siguen afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).

EL DESEMPLEO "VA A IR A PEOR"

Augurando que las cifras de desempleo "van a ir a peor" a cuenta del futuro de las personas que siguen bajo los ERTE al no recuperar sus empresas la actividad, Miguel Rus ha señalado también los casos de empresarios que "lo han perdido todo" y acuden a Cáritas o el Banco de Alimentos en demanda de ayuda ante su "absoluta ruina".

"Las empresas sevillanas no podemos soportar una cuarta ola" de la pandemia, ha aseverado con relación al impacto de las restricciones y limitaciones implantadas para combatir el avance del Covid-19 en cada una de las tres oleadas afrontadas hasta ahora.

A tal efecto, ha defendido la "colaboración" de la patronal sevillana con las administraciones en los diversos planes de reactivación frente a la nueva crisis, como el Plan 8 del Ayuntamiento de Sevilla de recuperación del sector turístico o el programa Contigo de la Diputación provincial, destinado a distribuir entre los municipios los remanentes de tesorería de la institución.

LOS ERTE

Rus ha considerado además "insuficiente" la prórroga del mecanismo estatal de financiación de los ERTE hasta el 31 de mayo, pidiendo la extensión del mismo y de las líneas de avales especiales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) frente a la nueva crisis.

En ese sentido, ha llamado también a "no perder el tren" de los 72.000 millones de euros librados por la Unión Europea para España a fondo perdido para incentivar la recuperación económica, avisando del "riesgo" de que las administraciones no sean "capaces" de gestionar y aplicar eficientemente todo ese dinero. En paralelo, ha reclamado "rapidez y eficiencia" a la hora de promover el nuevo fondo estatal de 11.000 millones en favor de la solvencia de las empresas, que incluye 7.000 millones en ayudas directas.

Y es que frente a los anuncios de los poderes, Miguel Rus ha alertado de que las medidas de apoyo al tejido productivo "llegan con mucho retraso".

Del mismo modo, ha reclamado de nuevo "reducir la presión fiscal", extremo que ha definido como "fundamental"; y ha considerado que revertir la vigente reforma laboral de 2012, algo comprometido tanto por el PSOE como por Unidas Podemos, socios en el Gobierno central, sería "una enorme irresponsabilidad".

RECLAMA "ESTABILIDAD"

Y es que para recuperar la actividad económica y el empleo "es imprescindible la estabilidad jurídica y política", algo que "facilita la confianza" y por ende la inversión. "No podemos seguir viviendo en la incertidumbre. No existe un plan de país y cada comunidad autónoma legisla a su manera", se ha quejado Miguel Rus, llamando a trabajar con "sentido de estado" y en favor del interés común.

Finalmente, ha defendido el papel de la CES en la Plataforma Ciudadana para una Sevilla con Futuro 'Sevilla Ya', que reclama los proyectos e infraestructuras de carácter estratégico de la provincia, insistiendo en que Sevilla "no puede seguir a la cola de España" y los proyectos demandados, como el cierre de la autovía metropolitana SE-40, la red completa de metro o la conexión ferroviaria con el aeropuerto, son ahora "más necesarios que nunca" para mejorar la competitividad de la provincia y generar empleo y riqueza con su ejecución.