La junta de gobierno del Ayuntamiento de Sevilla ha acordado este viernes iniciar los trámites para rescindir "por incumplimiento" el contrato de las obras previstas en el mercado de abastos de Triana, donde el Gobierno municipal tenía previsto invertir 281.287 euros para acometer la renovación de la cubierta. Esta actuación, no obstante, se acometerá una vez que quede resuelto este proceso y se pueda sacar de nuevo a licitación.
El Ayuntamiento de Sevilla ha tomado esta medida después de que la empresa haya incurrido en "causa de resolución", al incumplir el plazo de cinco meses de ejecución, periodo durante el cual solo ha ejecutado "el 10,5 por ciento" del presupuesto previsto.
El objetivo de este proyecto era el de dar una solución definitiva a las filtraciones y acumulación de agua que se produce en el Mercado de Triana. Sin embargo, la empresa que resultó adjudicataria del contrato el pasado mes de agosto ha incumplido el plazo de ejecución previsto. Según el acuerdo aprobado por la Junta de Gobierno local, la empresa adjudicataria ha incurrido en una causa de resolución prevista en la Ley de Contratos del Sector Público.
El proyecto contemplaba la ejecución de la renovación de la cubierta en dos fases. Durante la primera estaba previsto reforzar las vigas interiores de la estructura, unos trabajos que se iban a llevar a cabo en turnos de tarde para minimizar su impacto sobre la actividad comercial. En la segunda fase, se acometería la colocación de una nueva capa sobre la cubierta que actualmente existe en todo el edificio, exceptuando las dos calles más próximas a la calle Castilla, donde, a petición de los propios placeros, se iba a colocar una cubierta acristalada.
CONTRATO PARA LA AMPLIACIÓN DE LAS PERRERAS MUNICIPALES
Por otro lado, la Junta de Gobierno local ha acordado modificar el contrato del proyecto básico y de ejecución de obras de nueva planta para la ampliación de las perreras municipales. Este acuerdo permite que este proyecto se pueda llevar a cabo al ser necesarias una serie de actuaciones relativas a la afección de las raíces y al estado de los árboles ubicados en la zona próxima al terreno donde se ubicarán los nuevos edificios, circunstancia que no se había contemplado en la fase de redacción del proyecto.
