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Sevilla

Absuelto un joven acusado de intentar violar a su hermana

La Audiencia de Sevilla ha absuelto a un joven de 22 años, para quien el fiscal pidió once años de cárcel por intentar violar a su hermana

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La Audiencia de Sevilla ha absuelto a un joven de 22 años, para quien el fiscal pidió once años de cárcel por intentar violar a su hermana cuando acudió a su domicilio en la localidad sevillana de Los Molares, incumpliendo una orden judicial de alejamiento.

Una sentencia de la Sección Tercera, a la que ha tenido acceso Efe, condena a M.R.J. a 21 meses de cárcel por delitos de allanamiento de morada y quebrantamiento de medida de alejamiento, pero le absuelve del delito de agresión sexual en tentativa, por el que el fiscal pidió para él otros 11 años de cárcel y el pago de una indemnización de 12.000 euros.

Su hermana, menor de edad cuando ocurrieron los hechos, y la madre de ambos, que denunció el intento de violación ante la Guardia Civil, se acogieron en el juicio a su derecho a no declarar contra un familiar y la sentencia dice que el testimonio de los psicólogos que atendieron a su víctima sobre su credibilidad es insuficiente para emitir una condena.

La sentencia considera como únicos hechos probados que sobre el acusado M.R.J. pesaba una orden judicial de alejamiento de su hermana, pese a lo cual a las 7.30 horas del 23 de octubre del 2012 acudió a su domicilio para cambiarse de ropa y coger unas prendas de vestir.

Al ser sorprendido por su hermana, quien intentó llamar a la Guardia Civil para advertir de la presencia del imputado, éste le dio un golpe en la mano con la que sujetaba el teléfono para evitar que llevara a cabo la comunicación, según el fallo.

En el juicio, el acusado negó haber intentado violar a su hermana y declaró que ni siquiera la tocó con ánimo libidinoso, ya que su único contacto físico fue el golpe que le dio para quitarle el teléfono.

El acusado alegó en el juicio que acudió a la vivienda porque necesitaba coger ropa, pero la sentencia recuerda que, según su propio testimonio, mantenía buenas relaciones con su madre y se quedaba en casa de su abuela desde que el 30 de julio del 2012 dictaron contra él una orden de alejamiento, por lo que a través de esos familiares pudo pedir que le facilitaran las prendas.

La Audiencia le impone seis meses de cárcel por un delito de quebrantamiento de medida cautelar y otros 15 meses por allanamiento de morada.

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