El Real Betis cuajó un partido muy serio contra el Olympique de Marsella en el tercer test de pretemporada y acabó empatando a uno. Los de Pellegrini mostraron su habitual ritmo competitivo y más rodaje que en los anteriores duelos de este verano.
El partido se disputó con mucha intensidad teniendo en cuenta que se trataba de un amistoso. El Betis se amoldó al juego duro de los franceses y no se amedrentó en ningún momento, tanta tensión acabó en una tangana en los compases finales del partido.
Hubo ocasiones para los dos equipos y ninguno se impuso de todo a su rival. El equipo verdiblanco tuvo oportunidades importantes en la primera mitad, en la segunda los franceses fueron los que generaron más peligro.
Luiz Henrique volvió a consagrarse como el fichaje más ilusionante de este verano para el belicismo. El brasileño dejó varias jugadas muy interesantes y la sensación de que su aclimatación al fútbol europeo será bastante rápida. El otro futbolista que todos querían ver, Luiz Felipe, también dejó muy buenas sensaciones en los minutos que estuvo sobre el césped.
El tanto lo anotó Milik cuando restaban unos minutos para el final del partido y poco después Rodri puso el empate en el marcador.
La mala noticia de este partido fue que Martín Montoya se tuvo que retirar en la primera mitad con problemas físicos. El lateral tuvo que ser sustituido tras sufrir una fuerte entrada.