El lema ‘Ronda Visible’ resume a la perfección el objetivo de la Asociación Serranía Diverxa con la celebración de la manifestación del Orgullo Ronda 2023 este sábado 8 de julio, dar visibilidad a un colectivo que no pide ni más ni menos que el resto de la ciudadanía, que se respete su derecho a vivir como han elegido, sin que tengan la necesidad de esconder ante la sociedad lo que sienten ni de tener que explicar a sus hijos una situación familiar que debería vivirse con normalidad dentro y fuera del ámbito escolar, partiendo de la premisa de que todos somos iguales, independientemente del modelo de familia que queramos formar.
Así lo explican Germán Fornet, secretario de Serranía Diverxa -cuya presidenta es Zaira Ordóñez y vicepresidente Adrián Ruiz-, y Sabrina Guerra y Tatiana Matador, las dos personas que han sido elegidas para pronunciar el pregón en una jornada en la que se pretende disfrutar de momentos de convivencia y música en directo y, sobre todo, expresar el orgullo de ser quien cada uno quiere ser.
La Asociación Serranía Diverxa, que comenzó su andadura en 2021, ha desarrollado este año una programación que culmina con el acto del sábado, previsto a las ocho de la tarde en la Plaza Teniente Arce, tras la celebración de la marcha que comenzará a las siete de la tarde desde el inicio de la Carrera Espinel hasta llegar al punto de encuentro.
La entidad se muestra muy satisfecha con la respuesta que ha recibido, tanto por parte de patrocinadores como de artistas que han querido colaborar en la celebración de un evento abierto a toda la ciudadanía, y que cuenta con el apoyo de Restaurante Casapuerta en la organización. Por el escenario de la Plaza Teniente Arce pasarán Entre Bambalinas, Ainhoa Pérez, Manolita Chen, Martha Pérez, Cristina Lobato, Drag Trígida, Raúl Núñez y DJ Thunder.
La importancia de dar visibilidad
La celebración del Orgullo 2023 no se queda únicamente en una jornada, sino que conlleva la realización de un trabajo fundamental por parte de Serranía Diverxa a lo largo de todo el año. “Todo lo que hacemos con el Orgullo es darle visibilidad -explica Germán-, por eso hacemos un pasacalle con la bandera multicolor, con la música, para que la gente hable”, pero también les ha servido a los integrantes de la asociación para conocer diferentes circunstancias personales y “un poco más las problemáticas que hay, porque al hablar del tema con la gente me he encontrado a personas a las que veía todos los días que tienen sus necesidades” en este sentido.
Durante este año, la asociación ha trabajado codo con codo con los institutos rondeños, donde ha impartido charlas sobre diversidad sexual, diversidad familiar o lenguaje inclusivo, una labor que continuarán en septiembre con la finalidad de incluir materias de este tipo en los programas educativos.
Para Germán Fornet la necesidad más acuciante en Ronda es darle visibilidad al colectivo, de ahí el lema de ‘Ronda Visible’, porque aunque se han producido algunos actos homofóbicos puntuales, como pintadas en el banco arcoiris que se instaló en la Avenida Martínez Astein, “no es lo que más prevalece en Ronda”, asegura, sino que se vive “muy de cara a la galería, la gente dice ser muy abierta de mente y lo acepta todo, pero hay mucha homofobia interiorizada, incluso la misma persona homosexual se rechaza a sí misma por el entorno en el que vive”.
De ahí que el colectivo considere necesario darle esa visibilidad para que “la familia, los amigos y los conocidos puedan hablar entre ellos, independientemente de su opinión, que todas son respetables, pero por lo menos que se cree esa conversación, y a partir de esa conversación empezamos a construir”.
Además de dar visibilidad en el ámbito familiar, también es fundamental hacerlo en el escolar, “muchas familias lo que quieren es mirar por sus hijos, para que vivan en un mundo mejor del que están viviendo ellos, y por eso las pregoneras son una familia homoparental, para darle visibilidad también”.
El objetivo, normalizar
Para Sabrina Guerra y Tatiana Matador esta labor de visibilización era importante, sobre todo, de cara al inicio de la etapa escolar de su hijo, de poco más de tres años de edad, ante el temor de que “entrara en el cole y se sintiera diferente o aislado”, por el hecho de pertenecer a una familia homoparental, “pero hemos encontrado una buena respuesta por parte de los docentes”, asegura Tatiana, que entiende que hay que luchar “por darle visibilidad y normalizar” que existen diversos tipos de familia.
La familia de Sabrina -rondeña- y Tatiana -sevillana- vive en Ronda desde diciembre pasado, cuando entraron en contacto con Serranía Diverxa y comenzaron a colaborar con la asociación, con la idea de defender que hay unos derechos inherentes a todas las personas, y reivindicar que “no nos pueden quitar derechos, tienen que sumar, el ser humano tiene que ser libre de amar y vivir su vida como quiera”.
Para Sabrina, no se trata de “destacar que somos diferentes, sino que se trata de que desde pequeños se nos eduque para que seamos quienes queramos ser, porque somos personas y todos somos iguales”, y “hay que acabar con los estándares y los roles establecidos, sobre todo en Ronda, porque te vas a otro sitio y es mucho más fácil, pero aquí te dicen que el futuro que te tienes que labrar desde que eres pequeño es éste, y de ahí no te puedes salir”.
Uno de los motivos por los que se funda la asociación es precisamente crear una red de apoyo para todas aquellas personas que necesitan ayuda, “para que sepan que les van a escuchar, que no se van a sentir solos o solas”, apunta Sabrina, y, por supuesto, “normalizar, que se acaben los roles establecidos, hay que cambiar la historia”. “Hay muchísima lucha, queda mucho por andar. No es un día ni que se nos trate diferente, todos somos iguales, y tenemos los mismos derechos, y tenemos derecho a hacer nuestra vida como nos dé la gana, con quien nos dé la gana y de la forma que nos dé la gana, pero sobre todo nuestro hijo, que no se le discrimine, que se le trate por igual y que se acabe el rol de papá-mamá, porque hay muchas clases de familia. Que nadie se sienta diferente a los demás, que desde pequeño te enseñen a no discriminar esa niña a la que le gusta jugar al fútbol o a ese niño que quiere vestir de otra forma”.
Para Sabrina y Tatiana ésa será la idea que defenderán en el pregón, la visibilidad, y explicar a la gente que el Día del Orgullo es para manifestarse, pero que detrás de todo eso hay un trabajo diario para que niños, adolescentes y adultos no se sientan solos en su camino.
