Endesa ha finalizado esta semana los trabajos de mejora de las redes de distribución y la instalación de cuatro nuevos centros de transformación en la zona Norte de Granada, afectada por la saturación de las redes que provocan los enganches ilegales.
Esta semana, la empresa ha adecuado 2.000 metros de cableado de Baja Tensión en la barriada de La Paz que darán una mayor calidad de suministro a esta zona con problemas de saturación de líneas por los enganches ilegales. Según recalca en una nota la compañía, esto "no solo genera un perjuicio para las familias que se encuentran confinadas en casa a causa de la alerta sanitaria, sino que además la manipulación de las redes supone un grave peligro para la seguridad de las personas".
Asimismo están ya en funcionamiento los cuatro nuevos centros de transformación instalados en las calles Puerto Lumbreras, José Acosta Medina, Pintor Joaquín Capulino Jaúregui y Pedro Machuca.
Todas estas instalaciones puestas en servicio en los últimos cuatro meses en los barrios de La Paz, Rey Badis y Cartuja, donde hay 2.300 viviendas y solo 960 clientes con contrato, tienen una potencia como para dar suministro a 11.000 viviendas.
En estos meses, los técnicos de Endesa han instalado cerca de 1.500 metros de líneas de Media Tensión, 22.200 metros de cableado de Baja Tensión, 13 apoyos de madera, y se han renovado tecnológicamente las redes de Media Tensión, reconfigurándolas y digitalizándolas.
Con todas estas actuaciones Endesa busca cumplir el compromiso adquirido y ha confiado en que todas las infraestructuras instaladas tengan el efecto deseado en los suministros en vigor y no sirva de reclamo para más actividades ilícitas, en esta zona donde el 78 por ciento de la energía que se consume se hace de forma ilícita.
Endesa se sigue coordinando con los organismos competentes para proseguir con las acciones acordadas en la última Mesa de Trabajo creada para buscar una solución a la problemática que se vive en la Zona Norte.
Estas acciones pasan ahora por la coordinación entre las diferentes instituciones para regularizar y adecuar los suministros que carecen de contrato o de instalaciones seguras, y empezar a aplicar de forma masiva las ayudas establecidas por el Estado a través del Bono Social.
Estas ayudas, que se tramitan a través de las autoridades competentes y cuya aplicación se ha ampliado en esta situación de alerta sanitaria, pueden bonificar hasta casi la totalidad de la factura energética de las familias que cuentan con un contrato en vigor.
En la Zona Norte de Granada sólo el 9 por ciento de las familias cuentan con esta ayuda que podría extenderse a las más de 2.500 viviendas que carecen de contrato de suministro eléctrico en vigor en esta área.
La regularización de estas viviendas significaría, según Endesa, no solo una ayuda en forma de Bono Social, sino además la reducción de la saturación de las redes debido a los enganches ilegales, de ahí que este sea uno de los pasos fundamentales en la lucha contra esta problemática que azota a la Zona Norte.