El presidente de China, Xi Jinping destacó que la revolución comunista "transformó completamente el miserable destino de China de ser pobre"
El presidente de China, Xi Jinping, aseguró hoy, al abrir las celebraciones del 70 aniversario de la fundación de la República Popular, que "ninguna fuerza" podrá detener al pueblo y a la nación china "en su camino hacia adelante".
"Hace setenta años un día como hoy el camarada Mao Zedong declaró solemnemente al mundo en este mismo lugar la fundación de la República Popular China y el pueblo chino se puso en pie", proclamó Xi desde la Puerta de la Paz Celestial, frente a la plaza de Tianamen.
El presidente destacó que la revolución comunista "transformó completamente el miserable destino de China de ser pobre, débil y humillada durante más de cien años".
"No hay ninguna fuerza que pueda siquiera hace temblar el estatus de China o detener al pueblo y a la nación china en su camino hacia adelante", dijo entre los aplausos de las miles de personas que llenan las tribunas instaladas en Tiananmen para los festejos del aniversario.
Flanqueado por la plana mayor del Partido Comunista y también por el expresidente chino Jiang Zemin (1993-2003), Xi resalto que el pueblo chino "ha conseguido logros sin parangón que han maravillado al mundo" en las últimas siete décadas gracias a estar "unidos como un solo pueblo".
"Debemos permanecer unidos en torno al PCCh, debemos permanecer comprometidos con el espíritu de la paz, con la reunificación y con el modelo de un país, dos sistemas", dijo al tiempo que llamó a "contribuir al progreso de Hong Kong y Macao".
Asimismo instó a continuar hasta la "completa reunificación" del país, en referencia a la isla de Taiwán, que China considera parte de su territorio y a la que ha robado dos nuevos aliados recientemente.
"La China de hoy ha sido creada por cientos de millones de chinos y la de mañana será más próspera", concluyó el presidente en un discurso, más breve de lo esperado, que dio pasó al desfile militar, el mayor de la historia del gigante asiático, en el que se espera que se muestren armamentos y equipos hasta ahora nunca vistos.