El anuncio de la Casa Blanca llegó mientras el comité presidido por Nadler se preparaba para votar sobre la posibilidad de declarar en desacato al fiscal Barr
El presidente de EE.UU., Donald Trump, invocó hoy su poder ejecutivo para impedir el acceso de un comité del Congreso controlado por la oposición demócrata al informe íntegro del fiscal especial Robert Mueller sobre la trama rusa, lo que podría desatar una batalla en los tribunales.
"Ante el flagrante abuso de poder del congresista (demócrata Jerrold) Nadler, y por petición del fiscal general, el presidente no tiene otra opción que invocar su privilegio ejecutivo", anunció la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en un comunicado.
Nadler, que preside el Comité Judicial de la Cámara Baja de EE.UU., había solicitado al Departamento de Justicia todo el informe de Mueller -incluidos los tramos confidenciales- y algunos documentos relacionados, dado que la versión del reporte publicada hace unas semanas contenía numerosas tachaduras.
El anuncio de la Casa Blanca llegó mientras el comité presidido por Nadler se preparaba para votar sobre la posibilidad de declarar en desacato al fiscal general de EE.UU., William Barr, por negarse a entregarles la versión sin censurar del informe.
Se espera que el voto salga adelante en el comité, lo que dejaría en manos del pleno de la Cámara Baja -controlada también por los demócratas- la decisión de solicitar o no que se abra un proceso judicial contra Barr a nivel federal.
La decisión de Trump de invocar la figura del "privilegio ejecutivo", una doctrina que permite al presidente evitar la difusión de documentos o materiales que utiliza la rama ejecutiva, podría generar una batalla en los tribunales sobre su constitucionalidad.
En 1974, el Tribunal Supremo estudió un caso similar durante el escándalo Watergate que entonces afectaba al presidente Richard Nixon, y limitó notablemente la capacidad de los mandatarios estadounidenses de invocar el "privilegio ejecutivo".
Nadler lamentó hoy la decisión de Trump, al asegurar que "representa una clara escalada en el desafío generalizado" de su Gobierno a "los deberes del Congreso tal y como están definidos en la Constitución".
La portavoz de la Casa Blanca, por su parte, acusó a Nadler de hacer "peticiones ilegales y temerarias", y a la oposición demócrata de llevar al extremo su batalla política contra Trump.
"No les gustaron los resultados del informe (de Mueller), y ahora quieren rehacerlo", subrayó Sanders.
La versión censurada del informe de Mueller indica que el fiscal especial no halló pruebas de que el entorno de Trump colaborara con Rusia en su presunta injerencia en las elecciones de 2016, pero también arroja dudas sobre una presunta obstrucción a la Justicia por parte del mandatario. EFE