Francia, Bélgica y Luxemburgo expresaron hoy su voluntad de redinamizar el proyecto europeo, en una reunión en Luxemburgo dónde hablaron sobre la seguridad, el empleo o la lucha contra el terrorismo ámbitos donde opinan que la Unión Europea (UE) puede aportar un valor añadido.
La voluntad de los países, cuyos mandatarios se reunieron hoy a tres bandas es, dijo en rueda de prensa el presidente de Francia, Emmanuel Macron, "reformar en profundidad Europa", para relanzar el proyecto europeo en ámbitos como la economía y la política fiscal, la política social o la defensa.
Macron defendió la "responsabilidad particular" de los actuales dirigentes europeos, que deben decidir si quieren asistir a la "desintegración" del proyecto europeo o por el contrario, "ser la generación que refundará Europa".
Con ese objetivo, explicó, tiene previsto hablar con sus homólogos europeos en las próximas semanas, con la idea de proponer "una decena de puntos fundamentales" que según Macron servirán a ese objetivo.
En la misma idea incidió el primer ministro luxemburgués, Xavier Bettel, quien opinó que para dar un nuevo dinamismo a la UE es preferible "una Europa a dos velocidades" que permita a algunos países avanzar cuando ciertas iniciativas permanezcan bloqueadas por otros Estados.
Precisó, no obstante, que siempre se debería dejar la puerta abierta a que el resto de países pudiera unirse a los que impulsen los proyectos.
Bettel valoró, por otra parte, la voluntad de Macron de modificar la directiva europea sobre los trabajadores desplazados, que se enfrenta a la oposición de algunos países del centro y del este de la UE, y muy en particular de Polonia, y confió en que salga adelante en fechas próximas.
Por su parte, el mandatario belga, Charles Michel, defendió que, frente al "inmobilismo" de etapas anteriores, "ha llegado el momento" de que la UE se reforme para dar "respuestas" a las necesidades de los ciudadanos y para crear una Europa "más ambiciosa" en la defensa de los "valores comunes".
El objetivo de la alianza de los tres países, indicó, es ver de qué forma pueden poner en ruta juntos iniciativas "que pensamos que sirvan para volver a ilusionar sobre el proyecto europeo".
A nivel europeo, en el encuentro se abordaron en particular las prioridades e iniciativas europeas en el terreno económico, social, digital o cultural.
Se trata, entre otras cosas, de dar continuidad a la minicumbre que el propio jefe del Estado francés organizó el lunes en París con la canciller alemana, Angela Merkel, y con los jefes de Gobierno de España, Mariano Rajoy, e Italia, Paolo Gentiloni, en la que se discutió de lucha antiterrorista y de control de los flujos de inmigración procedentes del norte de África.
En la reunión, Macron y Michel trataron asimismo con Bettel otros asuntos bilaterales.
En su desplazamiento a Luxemburgo -el primero a ese país desde que inició su mandato en mayo-, el presidente francés fue recibido inicialmente por el gran duque Enrique.
