El oficialismo boliviano sufrió hoy un nuevo revés en la segunda vuelta de las elecciones para gobernadores en las regiones de Tarija (sur) y Beni (noreste) donde según los sondeos por recuento rápido ganó la oposición, que sumaría así el control de cuatro de los nueve departamentos del país.
Aunque el gubernamental Movimiento al Socialismo había puesto toda la carne en el asador para ganar en esta segunda vuelta, los opositores sumaron estas nuevas victorias a su notable avance en los comicios regionales del pasado 29 de marzo, cuando se hicieron con plazas emblemáticas del oficialismo como el departamento de La Paz y la Alcaldía de Cochabamba (centro).
La segunda vuelta de hoy ha sido el capítulo final de unas elecciones que han supuesto un varapalo para el partido del presidente Evo Morales, quien ha atribuido estos resultados a un castigo de los votantes a la corrupción, y a la falta de liderazgos regionales.
La oposición habría vencido al gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS) de forma contundente en Tarija, región que acumula las mayores explotaciones de hidrocarburos del país, mientras que en Beni la victoria sería muy estrecha, por apenas décimas, según esos datos difundidos por varios medios.
El abogado Adrian Oliva, de la Unión Departamental Autonomista (UDA), habría ganado la gobernación de Tarija con un apoyo de entre el 61,4 y un 62,1 % frente al aspirante del MAS, Pablo Canedo, que consiguió entre un 37,9 y un 38,6 %.
Oliva preside la Alianza Parlamentaria Democrática de América (APDA), que el año pasado, en nombre de varios legisladores de la región, presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional de La Haya contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por una supuesta violación de derechos humanos en su país.
Para consolidar su victoria en la segunda vuelta, Oliva firmó una alianza con el dirigente campesino Luis Alfaro, exparlamentario del MAS, y que en la primera vuelta electoral salió tercero.
En el departamento amazónico de Beni habría vencido la oposición por una apretada diferencia, al obtener el candidato Carlos Dellien, de NACER, entre el 50,2 % y el 50,5 % de los votos, mientras que el oficialista Alex Ferrier sumó entre 49,5 % y 49,8%.
En primera vuelta, Dellien asumió esa candidatura a última hora, tras la polémica decisión del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de anular, a pocos días de los comicios, la candidatura del opositor Ernesto Suárez, favorito según las encuestas.
Suárez, que promovió a Dellien para sustituirlo, declaró hoy que esa victoria prueba que el MAS nunca podrá ganar en Beni y afirmó que el triunfo está asegurado porque existe una diferencia de entre 2000 y 3000 votos a favor de la oposición.
Sin embargo, el candidato oficialista Ferrier contradijo los resultados de los sondeos y se dio como ganador.
Los medios usaron cómputos extraoficiales realizados por las empresas Equipos Mori y la empresa Ipsos.
Es habitual que en las elecciones en Bolivia se den por buenos los datos extraoficiales difundidos por los medios en la noche de los comicios, debido a la tradicional lentitud con la que trabajan los tribunales electorales para dar a conocer el recuento oficial.
Los sondeos coinciden la mayoría de las veces con los resultados oficiales que se difundirán hoy parcialmente y de forma completa en los próximos días.
De confirmarse los resultados pronosticados este domingo, la oposición controlaría cuatro gobernaciones (La Paz, Santa Cruz, Beni y Tarija), mientras que el partido del presidente Evo Morales consolidó en las elecciones del pasado 29 de marzo su presencia en los otros cinco (Cochabamba, Pando, Oruro, Potosí y Chuquisaca).
Ningún responsable del Gobierno o del MAS se pronunció sobre los resultados extraoficiales.
Morales, que en octubre pasado fue reelegido para un tercer mandato hasta el 2020, con más del 61 %, se involucró de forma intensa en las campañas de sus candidatos de la segunda vuelta.
El opositor Samuel Doria Medina, que se enfrentó a Morales en los pasados comicios presidenciales, dijo a los medios que "Tarija ha recuperado su dignidad" y que ese triunfo es un mensaje de defensa de la democracia ante el gobernante.
Asimismo, llamó a defender la victoria estrecha en Beni porque, aseguró, ya hubo pruebas de que los tribunales electorales "escamotearon" votos a la oposición en la primera vuelta.
Los tribunales departamentales regionales tomarán mañana juramento a los siete gobernadores (cinco oficialista y dos opositores) que fueron elegidos a fines de marzo.
Mientras, los tribunales electorales de Beni y Tarija deben publicar en las próximas horas los resultados oficiales y programar para el 25 de mayo la entrega de credenciales a los ganadores de esta jornada.