Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE han respaldado este lunes la extensión de las sanciones contra un dirigente próximo al régimen sirio de Bashar al Assad, que tendrá prohibido entrar en Europa y cuyos activos financieros y propiedades bajo jurisdicción europea también quedarán congelados, y a otras seis empresas y entidades, que se suman a las 128 personas y 43 entidades ya sancionados en rondas anteriores, según han avanzado fuentes europeas.
Los Veintisiete también han acordado introducir, a petición de algunos países, una clarificación en los textos jurídicos del régimen de sanciones de la UE contra Damasco para dejar claro que las empresas de seguros europeas tienen prohibido ofrecer seguros para cargamentos que pudieran llevar armas, han precisado las mismas fuentes.
En todo caso, las fuentes han admitido que esto ya se aplicaba en la práctica por la prohibición ya pactada en rondas anteriores de no prestar asistencia financiera ni servicios de seguros al régimen sirio. El embargo de armas a Siria de la UE entró en vigor en mayo de 2011.
Los ministros de Exteriores de la UE han respaldado sin discusión previa en su reunión de Luxemburgo las nuevas sanciones, que fueron pactadas esta mañana a nivel de embajadores permanentes de los Veintisiete, según han confirmado las fuentes.
Los Veintisiete discutirán este lunes la crisis en Siria tras los últimos acontecimientos sobre el terreno, especialmente el derribo de un avión militar turco por parte de las fuerzas sirias el pasado viernes.
Asimismo, discutirán sobre la posibilidad de introducir inspecciones obligatorias en las aguas territoriales europeas de buques de terceros países sospechosos de llevar armas al régimen, aunque fuentes diplomáticas europeas han descartado que lleguen a un acuerdo este lunes por la complejidad de la cuestión, incluso en términos legales y prácticos.
El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, admitió este jueves que el barco de carga que se dirigía a Siria y que fue obligado por las fuerzas británicas a cambiar de rumbo transportaba tres helicópteros y sistemas de defensa aérea que habían sido adquiridos por el régimen de Damasco. Previamente, una empresa aseguradora con sede en Londres había retirado el seguro al barco porque la habían advertido de que podría transportar armas.
INSPECCIONES DE BUQUES SOSPECHOSOS
Países Bajos ha sido uno de los países que más han defendido la necesidad de introducir estas inspecciones, mientras que Francia ha llegado a plantear cubrir también el espacio aéreo y poder derribar aviones sospechosos de llevar armas para el régimen.
Otros países con muchos kilómetros de costa y una Armada reducida, como en el caso de Irlanda, se han mostrado preocupados por la posibilidad de no contar con unidades ubicadas en el lugar apropiado o no llegar a tiempo, dentro de sus aguas jurisdiccionales.
Los Veintisiete necesitan discutir aspectos como qué se haría en el caso de que se encontraran armas en un barco de un tercer país sospechoso de llevar armas para Siria en sus aguas territoriales y qué ocurriría si ha sido imposible pararle dentro de las mismas y ocurre en aguas jurisdiccionales internacionales dado que el Consejo de Seguridad de la ONU no ha autorizado un embargo de armas a Siria por el veto de Rusia y China.
A pesar de que la misión de observadores de la ONU ha tenido que poner fin a sus actividades por la violencia sobre el terreno, la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha insistido en la necesidad de respaldar el plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, para llegar a una solución pacífica en Siria e influir en los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU a fin de que asuman su responsabilidad. Hasta ahora Rusia y China han rechazado toda opción que abra la puerta a una intervención militar, como en Libia.