Los responsables de Defensa surcoreano y estadounidense, Lee Jong-sup y Lloyd Austin, se mostraron hoy de acuerdo en que han sido falseados los documentos del Pentágono filtrados recientemente a redes sociales que revelan que Washington supuestamente espió a la Oficina Presidencial surcoreana.
La afirmación la realizó el viceasesor de Seguridad Nacional surcoreano, Kim Tae-hyo, que habló con los medios después de que ambas partes mantuvieran una llamada telefónica y justo antes de que Kim tomara un vuelo con destino a Washington para preparar la cumbre que los presidentes de los dos países mantendrán en dos semanas.
"Los titulares de Defensa de ambos países mantuvieron una llamada telefónica y las opiniones de ambos coincidieron. Los dos países tienen idéntica opinión sobre que gran parte de la información divulgada ha sido inventada", dijo Kim.
Poco después, la propia Oficina Presidencial publicó un comunicado que repite exactamente lo dicho por Kim e insiste en que ambos países "fortalecerán la confianza y cooperación mutua a través de una alianza sólida en materia de inteligencia".
IMPOSIBLE REALIZAR ESCUCHAS
Representantes de la Oficina Presidencial indicaron hoy a su vez a la agencia Yonhap que es imposible realizar escuchas de lo que sucede dentro de estas instalaciones en Seúl, incluyendo el búnker subterráneo donde el Consejo Nacional de Seguridad (NSC) suele reunirse.
Según los documentos filtrados- la mayoría de los cuales se centran en inteligencia extraída al bando ruso en el marco de la Guerra de Ucrania pero que también incluyen supuestas escuchas a aliados como Corea del Sur, Israel o la propia Ucrania- la inteligencia estadounidense habría espiado una conversación que tuvo lugar durante una reunión del NSC.
En ese diálogo, el entonces secretario presidencial para Asuntos Exteriores, Lee Moon-hee, y el Asesor de Seguridad Nacional, Kim Sung-han, hablaron supuestamente sobre la petición de Washington para que Seúl suministrara munición que se cree que podría ir destinada al ejército ucraniano, contraviniendo el compromiso surcoreano de no facilitar material letal a países en conflicto.
Fuentes consultadas por Yonhap afirmaron hoy que esa conversación entre Lee y Kim no tuvo lugar en la Oficina Presidencial y que, de hecho, probablemente nunca tuvo lugar.
Además de que el caso ha salido a la luz apenas dos semanas antes de que el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, realice una visita de Estado a EE.UU., el asunto ha removido las aguas en Corea del Sur después de que el propio Yoon decidiera trasladar abruptamente la Oficina Presidencial tras ganar las elecciones en mayo de 2022 al área donde se encuentra el Ministerio de Defensa en el distrito de Yongsan en Seúl.
ACUSACIONES DE LA OPOSICIÓN
El principal bloque de la oposición en el país, el liberal Partido Democrático (PD), acusó en su momento a Yoon de trasladar la oficina por consejo de un chamán, después de que tanto al presidente como a la primera dama, Kim Keon-hee, se les haya ligado con prácticas esotéricas.
Representantes del PD han apuntado a la posibilidad de que durante el traslado de la Oficina Presidencial se hayan mezclado dispositivos de escucha con otros equipos, han instado a verificar el supuesto espionaje y han pedido que se reconsidere la visita de Estado de Yoon a EE.UU.
En el comunicado publicado hoy la Oficina Presidencial replicó a estas palabras asegurando que las alegaciones del PD son "falsas y absurdas" y que "atentan contra los interesas nacionales".
"La Oficina Presidencial en Yongsan es una instalación militar, y hay un sistema operativo, que es mucho más robusto que el que había anteriormente en la Casa Azul (antigua sede presidencial), para prevenir escuchas", añade el texto, que asegura que la nueva configuración de la oficina, "menos desperdigada" que antes, permite mantener una seguridad más robusta.