Los farmacéuticos piden extremar las precauciones al haber estado casi tres meses encerrados en casa debido al confinamiento derivado del COVID-19
La poca exposición a la radiación solar que ha habido durante el confinamiento supone un riesgo mayor del habitual de quemaduras en la piel durante los primeros días de visita a la playa, según advierten los farmacéuticos.
"Tras el largo periodo de cuarentena nuestra piel no está adaptada a la radiación solar tan alta de estos días, que ya de por sí es bastante dañina", ha señalado el vocal de Dermofarmacia del Colegio de Farmacéuticos de Málaga, Manuel Esteban.
A este respecto, ha recordado que el confinamiento se inició en invierno y se va a terminar "casi en verano", por lo que "no hemos tenido -ha explicado- el proceso de transición natural durante la primavera".
En este sentido, ha destacado que es más importante que nunca "evitar la exposición al sol durante las horas centrales del día, utilizar de forma abundante y recurrente la protección solar y ser especialmente cuidadoso con niños, embarazadas y personas mayores".
El Colegio de Farmacéuticos insiste en la necesidad de aplicar cada dos horas una crema de protección solar con un factor alto, que se podrá ir rebajando con el paso de las semanas según el fototipo; aplicar cremas hidratantes una vez se haya regresado de la playa, mantener el cuerpo hidratado mediante la ingesta de agua y consumir alimentos ricos en vitamina C.
Asimismo, es importante revisar la fecha de caducidad de los productos de protección y evitar el usar los mismos de una temporada a otra porque si están abiertos ya se minimiza su efecto protector.