Los padres del Colegio Julio Caro Baroja en Guadalmar han anunciado que no llevarán a sus hijos a clase este viernes en protesta por la presencia de mosquitos, cuyas picaduras se están convirtiendo en una auténtica pesadilla para los pequeños. Pese a los esfuerzos del plan de acción puesto en marcha a principios de mayo, la presencia del insecto en el entorno de la desembocadura del Guadalhorce mantiene en pie de guerra a estos vecinos, y los de Sacaba Beach y Parque Litoral. Todo, pese a que el Ayuntamiento de Málaga fumigó en la tarde del pasado lunes el entorno del colegio de Guadalmar, la urbanización Sacaba, Inacua y la antigua butano.
El Ayuntamiento de Málaga ha habilitado el teléfono gratuito 900 900 000 para solicitar la posibilidad de realizar el tratamiento en las zonas verdes y espacios comunes de las urbanizacionesAdemás, ha habilitado el teléfono gratuito 900 900 000 para solicitar la posibilidad de realizar el tratamiento en las zonas verdes y espacios comunes de las urbanizaciones.El edil de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, aseguró ayer que el incremento en la presencia de mosquitos responde “al mar de levante que se produjo recientemente, favoreciendo la evolución de las larvas en los charcos que quedaron”. Una respuesta que no convence a los padres, que pese a embardurnar a sus hijos en repelente, vuelven plagados de picaduras.