El Málaga, quizás pensando en la Copa del Rey del jueves ante el Barcelona, perdió una oportunidad de apuntarse la victoria ante el Celta, que tuvo ocasiones y que pudo ganar si Quique De Lucas no falla una ocasión clara en los últimos instantes que le adivinó uno de los héroes, el guardameta argentino Willy Caballero.
El equipo malagueño, que ha entrado en mala racha en la Liga, se presentó en La Rosaleda con un cambio significativo en la alineación, la entrada del delantero argentino Diego Buonanotte, por primera vez titular, en detrimento del centrocampista portugués Eliseu Pereira.
Además el técnico chileno Manuel Pellegrini, apostó nuevamente para el medio centro por su compatriota Manuel Iturra, por el gran encuentro que realizó el pasado miércoles en la Copa del Rey ante el Barcelona en sustitución de Ignacio Camacho.
El Celta, sin el defensa Hugo Mallo lesionado, optó por un once ofensivo con su goleador Iago Aspas como máximo exponente en ataque.
Los malaguistas dominaron de salida y con tan sólo dos minutos jugados un centro por la derecha de Sergio Sánchez a punto estuvo de aprovechar con un disparo que paró Javi Varas.
No se arrugó el Celta, que respondió con otro disparo y con una jugada por la derecha con pase de Jonny, que no encontró un compañero para empujar el balón en la línea del área pequeña.
Respondió el Málaga con dos jugadas por la izquierda del paraguayo Roque Santa Cruz, que tampoco encontraron rematador en el área pequeña.
El encuentro estaba abierto, con ocasiones, y algo más hecho el Celta, que volvió a atacar con una acción del danés Krohn-Dehli en el minuto 15, cuyo lanzamiento lo despejó Caballero.
El partido era vistoso por el sistema ofensivo de los dos equipos. El Celta volvió a tener la oportunidad de adelantarse por un error defensivo, que Iago Aspas, desaprovechó a lanzar flojo y mal.
El Málaga no se amilanó y en una jugada embarullada dentro del área pequeña, tras un saque de esquina, con varios rechaces, el zaguero argentino Martín Demichelis, oportunista en la misma línea de gol, adelantó a su equipo en el minuto 36.
Los jugadores del Celta, sobre todo el guardameta Javi Varas, fueron a hablar con el asistente de Estrada Fernández, porque pedían mano de Santa Cruz, en el control del balón, que luego sirvió para que el central argentino, que fue padre ayer de una niña, marcara el primer gol del partido y único hasta el descanso.
Javi Varas evitó la sentencia en un tiro de Santa Cruz y el Celta tampoco se rindió, tanto que supo aprovechar un error defensivo de los locales, opacos y sin sentido, para, con el gol de Augusto (m.76) sellar las tablas.
El Málaga acusó el varapalo y el Celta no supo remachar el encuentro, sobre todo en una postrera ocasión de De Lucas, que tras un fallo de Demichelis permitió que Caballero le arrebatara el balón.
Al final, tablas y el Málaga a pensar en el Barcelona en la Copa del Rey y a tratar de reaccionar en su próximo encuentro liguero.
