Las obras de Calle Carretería continúan latiendo en uno de los puntos más icónicos del centro de Málaga. El 4 de octubre de 2021 empezó la semipeatonalización que Urbanismo sacó adelante con unos tiempos de construcción que no se han cumplido. El proyecto de remodelación de la zona se fijó en un plazo de 18 meses y un coste de 3,82 millones de euros. La famosa escalinata va con retraso y son muchos los malagueños que se preguntan cuándo terminará la faena.
La obra consta de cuatro fases. La primera, que va desde la Tribuna de los Pobres hasta la Calle Postigo de Arances, tendría que haberse acabado a principios de abril, según los planes de Urbanismo. Pero la aparición de los tirantes de unos muros que se levantaron con anterioridad para controlar el cauce del Río Guadalmedina provocaron el primer retraso. De hecho, para la Semana Santa se tuvo que improvisar un vallado de seguridad, dejando solo un pasillo lateral para acceder al Puente de la Aurora. La Tribuna de los Pobres, por tanto, no llegó a tiempo para utilizarse como palco low-cost para los cofrades menos pudientes.
¿Cuándo estará lista la obra?
El concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, ha asegurado que la primera fase se acabará en junio, si no hay imprevistos. Dos meses de retraso que afectan a los vecinos y sobre todo comerciantes de la zona, que han vivido un bajón de la clientela por las dificultades de acceso, lo que se traduce en pérdidas económicas.
Además, si todo fluye sin obstáculos -literalmente-, la gente podrá transitar con normalidad por la Tribuna y parte de Carretería para el mes de julio. El gran reto de reubanización de la zona, eso sí, no estará listo del todo hasta 2023. Los 18 meses previstos, debido a la demora de los últimos meses, se irá como mínimo a los 20 meses.
Tras la fase inicial quedarían otras tres. La fase dos entre Postigo de Arance y la Plaza San Francisco (se empezaría en junio, coincidiendo posiblemente con la finalización de la primera fase); la tres en el tramo Plaza San Francisco y Calle Ollerías y la cuarta, Calle Ollerías, Dos Aceras y Álamos.
¿Cómo será?
La Tribuna de los Pobres mantendrá su esencia. En uno de los primeros diseños de los técnicos de la Gerencia de Urbanismo se arriesgaron a quitar la barandilla y las jardineras y situar, junto a una escalera pelá y mondá, una cabina de atención al público. Finalmente, tras discutirlo en plenos y con los vecinos, será más una restauración que una transformación.
Se conserva el mismo trazado curvo de la escalinata, el muro de mampostería, las barandillas laterales y la farola de cuatro brazos. Por otra parte, se recuperará el mismo diseño de los maceteros originales y los machones de piedra que sirven de apoyo a la barandilla sobre el muro.
Más allá de la Tribuna, se cambiará todo el eje de las calles Carretería y Alamos para que el peatón sea el protagonista. Habrá zonas ajardinadas, árboles y una calzada más estrecha (de seis metros, pasará a tres). Se reducirá el tráfico en un 21%, según los estudios previos. De hecho, se van a instalar cámaras de vigilancia para controlar el paso de los vehículos autorizados y el tránsito queda reducido a residentes.
Las aceras ganarán tres metros, por lo que la superficie para los viandantes será un 42% mayor. Una transformación que beneficiará al caminante y perjudicará al que se atreva a cruzar sobre ruedas por Carretería. Pero para ello habrá de tener paciencia y depender de que no haya más imprevistos en la obra más conocida de la capital.