Como adelantó este diario, a la pareja está formada por David Santiago Santiago, de 31 años y su esposa, Susana Cortés García, de 20, les fue retirada temporalmente la tutela de sus hijos, de 1, 2, 3 y 4 años porque la vivienda en la que residían no reunía las condiciones higiénico sanitarias necesarias para los pequeños. Desde entonces, los Servicios Sociales han trabajado con los jóvenes.
Santiago Santiago destacó que, “en las últimas fechas nos hemos desplazado hasta el centro Chipiona y constatamos que nuestros pequeños estaban muy bien”. Por ello, añadió, “ahora estamos muy contentos, dado que tendremos la posibilidad, a partir de octubre, de poder tenerlos con nosotros y, para noviembre o diciembre, que vivan en nuestra casa de forma definitiva”.
Hasta entonces, “recogemos chatarra para poder tener recursos económicos que nos permitan poder ir a ver a nuestros hijos”. Además, David Santiago aseguró que, tras las gestiones realizadas el pasado 25 de junio, a la búsqueda de un puesto de trabajo, “como consecuencia que desde pequeño padezco una dolencia por la que no veo por uno de mis ojos y por el esfuerzo que realiza el otro, tengo problemas de visión, me han confirmado que tendré un puesto en la ONCE para poder trabajar”.
Arreglo de la casa
Al respecto, el joven recordó que “en éstos últimos meses hemos ampliado nuestra vivienda y hemos habilitado un dormitorio para cada uno de nuestros hijos, así como un salón cocina, un aseo y dos patios muy grandes para que puedan jugar”.
Todos estos trabajos “los hemos realizado con la esperanza de que pronto puedan venir con nosotros nuestros hijos”.
Con ello, concluyó, “pretendemos mejorar las condiciones higiénico sanitarias de nuestra casa, que nos consta ha sido uno de los motivos por los que se llevaron a nuestros hijos”.