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Jerez

El Nazaret, como cohesión social

El Club nació cuando Jerez se desperezaba de una época en la que solo existía la clase élite y la baja y la clase media comenzaba a emerger

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  • Instalaciones del Club Nazaret -

De  la alpargata al 600; de la casa de vecino al pisito en el nuevo Jerez que afloraba en la antigua La Granja, con Icovesa, Los Naranjos, Juan XXIII, Las Torres. Jerez, estoy escribiendo de la segunda década de los 60 del ya pasado siglo, se desperezaba de una época en la que la clase media brillaba por su ausencia  y eso lo llegó a sufrir en sus propias carnes el alcalde Miguel Primo de Rivera. Existía la clase  élite y la baja y en esos años comenzó a emerger la clase media que encontró un aliado en monseñor Cirarda Lachiondo, obispo auxiliar de Sevilla con destino en Jerez, aún Jerez no era Diócesis, que con sus aires vascos vio la opción de que esa emergente clase media tomase realmente asiento en la ciudad. Y de   sus reuniones con Mateos Mancilla, de sus cuitas con el presidente de la Caja de Ahorros de Jerez, Juan Miguel Pomar y con el trabajo eficaz y jerezanísimo del director de la Caja, Jesús Mantaras, se fraguó un club para la clase media, un club alternativo a aquel exclusivo del Tiro de Pichón de Chapín.

El día 1 de noviembre de 1967 se inauguró ese club que es un orgullo de Jerez y que, de alguna manera, y lo dijo Sanz Cabello en su alocución del pasado sábado en la plaza del Salón Matrimonial, vino a cohesionar a la sociedad jerezana, haciendo un función social poniendo en valor la familia, el respeto, la educación y la convivencia. Los cuatro ases fundamentales de un club que, a través del tiempo y del cambio de la sociedad, se ha sabido abrir a Jerez, como refería la alcaldesa Mamen Sánchez, hasta el punto de que hablar del Club es hacerlo de Jerez. Por eso, precisamente porque es un Club de, por y para Jerez, la regidora de nuestro Ayuntamiento prestó toda su “complicidad” para que “tengamos cincuenta años más de club”.

Y es que el Club Nazaret es parte de la historia del nuevo Jerez, ese nuevo Jerez que ha conocido y vivido el subdirector Financiero y de Contabilidad de la Fundación Cajasol, Antonio Llanas, quien asumió públicamente el compromiso de que el presidente Antonio Pulido se siente con los actuales directivos de la entidad para “conseguir juntos muchas más cosas” y, subrayo, para que el Club siga siendo de Jerez y de los jerezanos sin “sorpresas”.

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