En cuestión de una semana y poco más Aitana Fernández tendrá un ascensor para subir y bajar a la calle cuantas veces le plazca y no estar dependiendo de sus familiares y vecinos para que carguen con ella y con su silla de ruedas en peso por las escaleras desde la segunda y última planta del bloque en la que vive, circunstancias que últimamente estaba limitando mucho sus salidas.
Ahora sí la Obra Solidaria Aitana Fernández que encabezaba la Hermandad de la Salud y numerosos colectivos pueden dar por cumplido su objetivo. Hace justamente un año la familia de esta niña de 10 años que nació con Mielomeningocele (Espina Bífida) e Hidrocefalia y cuyo caso saltó a la luz por las protestas de los padres de su colegio de Torresoto para instalar un elevador, iniciaba una nueva cruzada, esta vez para tener ascensor en su piso de la calle Marcelo Villalobo, en la zona sur . Sus padres, en paro, ni los los vecinos no podían hacer frente a una derrama extraordinaria, pero finalmente el logro ha sido fruto de todos. De hecho, el presupuesto inicial presentado por la empresa encargada era de 20.000 euros, si bien la entidad jerezana encargada también ha puesto su granito de arena y lo ha acabado rebajando en casi 2.000 euros.
El resto ha corrido a cargo de donaciones y eventos solidarios, entre los que han conseguido casi 10.000, a los que hay que sumar otros casi 6.000 obtenidos en un conocido programa de la televisión autonómica. Aunque el dinero lo reunieron el pasado mayo, no ha sido hasta este pasado lunes cuando han comenzado las obras de instalación debido al tiempo que han tenido que emplear en tramitación de todos los permisos necesarios. En casa de la pequeña están pletóricos y, sobre todo, agradecidos a la ciudad de Jerez.