Según informó este viernes la Delegación de Seguridad Ciudadana, que coordina el teniente de alcalde José Luis Navarro Sampalo, en la mañana del pasado martes los agentes en cuestión localizaron un vehículo que transportaba pescado para su venta ambulante en San Roque Casco.
Una vez que se comprobó que no se contaba con licencia para la venta ambulante, el propietario del vehículo, residente en La Línea, fue denunciado por realizar esta actividad sin la preceptiva autorización.
La mercancía fue inspeccionada por un veterinario del Servicio Andaluz de Salud, quien indicó que no ofrecía las debidas garantías para su consumo. Por ello, y en virtud de las facultades otorgadas por la legislación vigente, desde la Alcaldía se ordenó el decomiso y posterior destrucción higiénica del producto. Se trataba de cinco kilogramos de peluda, dos de calamar y uno de langostino