La empresa onubense Infotelwi, que intentó hacerse con las acciones del Recreativo, emitió una factura con fecha de 9 de junio de 2016 al club onubense por importe de 9.431,01 euros, en concepto de abonar una parte del informe de auditoría. El dueño de dicha empresa, Felipe Cascajo, envió esta factura tan solo tres días de que el Ayuntamiento de Huelva manifestara su intención de expropiar las acciones del Gildoy España al frente del Decano.
Según el abogado onubense Ramón López, esta acción de Infotelwi podría ser irregularidad fiscal, ya que es una empresa dedicada a las telecomunicación y no se dedica a la realización de auditorías. Además, en el caso de que en la negociación de compra-venta del Recreativo, si Cascajo debía asumir el coste de la auditoría y al final no terminó de concretarse la operación, tendría que rendir cuentas con Pablo Comas, titular de Gildoy España, y no al Ayuntamiento.