Comunicado de la Mesa de la Ría con motivo de la celebración, este viernes 22 de marzo, del Día Mundial del Agua
Este viernes, 22 de marzo, se celebra el Día Mundial del Agua, una fecha que debería estar marcada en rojo en el calendario onubense con el fin de trabajar en serio y unidos todos los días para poner freno a los ataques que desde hace demasiado tiempo atrás sufre el oro líquido en nuestra tierra.
Huelva sufre desde hace siglos, con la actividad minera, el grave problema de la contaminación de sus aguas. En las últimas décadas, la invasión industrial en nuestra ciudad ha hecho que nuestras aguas sean gravemente contaminadas. La actividad química contaminante y la dejadez de unas administraciones que no han luchado por una ría limpia llevan a que Huelva tenga que celebrar esta especial fecha con demasiadas lagunas en lo que al cuidado del agua se refiere.
Tenemos claros ejemplos en nuestra ría, como el caso de las filtraciones de las balsas de fosfoyesos, que amenazan con hacerse eternas, los lixiviados radiactivos de cesio 137 o de los terrenos contaminados de Corrales, los tubos de las fábricas echando día y noche vertidos contaminantes… O lo más reciente, los más de 2 millones de litros de vertidos que cada día se echan en una arqueta en el barrio del Matadero, procedente de la extracción de gas de Repsol en la linde con Doñana sin Autorización Ambiental, y cuyos residuos se filtran cada día a la ría de Huelva.
Es un buen día para recordar que desde Mesa de la Ría no nos cansaremos de denunciar la lacra de los fosfoyesos hasta que se pongan sobre la mesa soluciones reales para recuperar la marisma medioambiental y visualmente hablando. Un buen día para seguir presionando por la recuperación de la Avenida Francisco Montenegro, que supondría poner fin a las filtraciones diarias a nuestras aguas por parte de la industria sucia que ya no tiene cabida en una Huelva que quiere mirar al futuro. Un buen día para lamentar cómo el oro líquido, un bien esencial para la vida, ha pasado de ser un servicio público a una guerra privada, un negocio con guerras políticas abiertas para hacerse con su gestión. Un buen día para recordar los pozos ilegales en Doñana, los pesticidas que se filtran en las aguas subterráneas, el fracking que nos amenaza con una técnica que inyecta agua con contaminantes químicos para la extracción del gas pizarra no convencional con el riesgo cierto de contaminar de forma irreversible los acuíferos, tan necesarios para la biodiversidad, como vitales para los agricultores…
Huelva tiene un problema con su agua, y este viernes, 22 de marzo de 2013, Mesa de la Ría quiere aprovechar para recordar que su trabajo no desfallecerá hasta que la actividad de esta tierra recupere, de una vez, el respeto con este bien tan imprescindible y que tanto y tanto tiempo lleva maltratándose en nuestra tierra.