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El futuro de la presa de Alcolea no se decidirá antes de finales de 2023

El Gobierno esperará las conclusiones de un informe del Cedex que abarcará un año hidrológico completo antes de decidir el futuro de la infraestructura

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El futuro de la presa de Alcolea no se decidirá, al menos, hasta dentro de un año. Así se desprende de las últimas declaraciones del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, que ha indicado que el informe definitivo sobre la viabilidad de la infraestructura estará terminado “a finales de 2023 o inicios de 2024”.

Según explica Morán, “el criterio de continuar adelante o descartar definitivamente las obras” se adoptará en base a las conclusiones del estudio que el Centro de Estudios Hidrológicos del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) está elaborando por encargo del Ministerio de Transición Ecológica y que va a consistir en el chequeo “del comportamiento de las aguas durante todo un año hidrológico”.

Morán recuerda que fueron los propios técnicos de Cedex quienes recomendaron “hace unos meses” al Ministerio realizar este “seguimiento de un año hidrológico completo” para poder confirmar o descartar las conclusiones que habían alcanzado en un estudio anterior y que apuntaban a que las aguas de la presa podrían ser “no aptas para el uso que se pretende”.


El secretario de Estado recuerda que fue la propia Junta de Andalucía quien detectó durante la planificación hidrológica de la cuenta Tinto-Odiel-Piedras que el agua embalsada en la presa de Alcolea podría no cumplir con la calidad exigida por la normativa debido a la “contaminación ácida en el río Odiel”. Por ello, indica Morán, el Ministerio decidió replantearse el proceso de readjudicación de las obras de la presa de Alcolea (paralizadas desde 2017) hasta tener la confirmación de que las aguas pueden destinarse al uso previsto.

La propia Junta de Andalucía, relata Morán, volvió a encargar nuevos informes que también han venido a “consolidar las dudas respecto a esta infraestructura en relación con el hipotético no cumplimiento de la calidad del agua”.

A juicio de Morán, con todos estos informes sobre la mesa, seguir adelante con las obras  podría, incluso, “llevar a una malversación de fondos públicos” ya que se estarían desoyendo las advertencias que apuntan a la imposibilidad de utilizar la presa para los fines previstos.

Hugo Morán ha garantizado que el futuro de la presa se decidirá siempre en base a criterios técnicos. “Vamos a ser absolutamente rigurosos en este proceso porque se trata de disponer de recursos públicos al servicio de los ciudadanos”, afirma el secretario de Estado de Medio Ambiente.

 

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