Tiene 40 años, es profesor y, desde hace poco, tiene su propia academia en la que imparte clases a los escolares esteponeros. Hasta ahí, puede ser el currículum de cualquier educador. Normal y corriente. Pero José Luis Usero no es un profe al uso. Su novedoso método de enseñanza hace que el alumno se lleve las clases allí donde vaya. Youtube se ha convertido en la ventana en la que enseñar, literalmente, al mundo. Con más de 9.000 vídeos subidos a la red, su forma de enseñanza traspasa fronteras.
—Ha impartido clases en varias centros de formación, pero en 2012 decide dar el gran salto y montar su propia academia, ¿por qué?
—Llevo 20 años escuchando “¿y por qué no te montas por tu cuenta? Tú eres un buen profesor. Seguro que te iría bien.” y ya me he hartado. Y ahora solo escucho “lo tenías que haber hecho antes...” Tenían razón antes y ahora. Hay que rendirse ante la evidencia.
—En estos pocos meses de experiencia, ¿qué destaca?
—El apoyo de muchos padres, poder compartir sus problemas y que me permitan ayudarlos a cuidar a quienes más quieren. Es una gran responsabilidad. Y el ver a la mayoría de los chicos esforzarse cada día, aunque a veces les cueste mucho. Pero siguen intentándolo. Cuando se van, siempre me quedo pensando quién es el maestro y quién el alumno, porque me enseñan cada día a ver las cosas de otra manera.
—Academia Usero no es un centro de formación al uso. Imparte los mismos contenidos, pero con un método completamente novedoso a través de vídeos que sube a Youtube. ¿Cómo le surge la idea? ¿Qué cree que aporta este sistema?
—Hace 5 años una alumna se puso enferma y no pudo venir a clase. Tenía un examen el lunes y algunas cosas no las tenía muy claras, así que pensé: “¿dónde está la webcam? Vamos a ver como es eso de Youtube…”. En ese momento no había muchos vídeos educativos y pensé que sería una buena idea. Algunos alumnos se quejan de que no se les explican las cosas, de que no se acuerdan, de que el profesor es muy malo… Desde entonces, miles de profesores en todo el mundo usan Youtube como un medio para acercar los contenidos a los alumnos. En EEUU, Salman Khan con su www.khanacademy.org recibió 16’5 millones de dólares de Bill Gates para desarrollar su proyecto. La educación está cambiando e Internet nos está dando pistas sobre hacia dónde va. Los críticos dicen que el aprendizaje online es pasivo y que no puede reemplazar a la dinámica de un aula o a la sabiduría de un buen profesor. No estoy de acuerdo. Para el que quiere aprender y, por cualquier razón, no puede, los vídeos y otros recursos accesibles por Internet pueden suponer la diferencia entre no entender algo y entenderlo. Este tipo de educación aporta, aunque parezca un contrasentido, cercanía.
—Gracias a este sistema tiene ya 9.400 vídeos subidos a Youtube, sobre diversas materias, ¿pensaba cuando empezó que verían sus vídeos al otro lado del mundo?
—Solo transmito lo mejor que puedo lo que me han enseñado. Los conocimientos no pueden ser de nadie, la cultura no se puede prostituir, aunque algunos se empeñen en hacerse millonarios vendiéndola. Si ayudo a una sola persona a aprender algo, mi esfuerzo habrá tenido recompensa. La mayoría de los visitantes son de habla hispana: México, Colombia, Argentina, Perú… Son jóvenes pero también hay un grupito de gente mayor que supongo serán padres y madres ocupados en ayudar a sus hijos. Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia, y, a mí me parece mágico poder ayudar a una persona que está a miles de kilómetros de aquí.
—Ha recibido miles de mensajes agradeciendo tu labor...
—Miles no, pero cientos sí. Recibo muchos insultos y críticas también: “Eres un pendejo…”, con lo que he aumentado un montón mi vocabulario. Pero hay gente muy agradecida que gasta unos segundos de su tiempo. Y eso es una recarga instantánea de ilusión. Seguiré haciendo los vídeos
aunque no lo agradezcan, pero cada agradecimiento es un regalo muy valioso.
—Una firme apuesta por la enseñanza gratuita. Como docente, ¿cómo ve la educación en la actualidad?
—Como docente que he sido en la Educación Pública el pasado año, ya tienen bastante los compañeros y compañeras con hacer todo lo que hacen. No se puede hacer más con menos. Y ahora les bajan el sueldo. En mi experiencia, entre el trabajo administrativo y preparar las clases, queda poco tiempo para educar como a mí me gusta: valores, valores, valores. En algunas instituciones se toman la educación como mera instrucción. Y está muy bien. ¿Pero para qué quiero un ingeniero nuclear que no sienta que hacer una bomba atómica es dañino para la humanidad? Y otras instituciones tratan la educación como un negocio, con métodos de evaluación, como mínimo, discutibles. Pero la sabiduría no se puede comprar ni vender. La Educación ha de ser libre y gratuita y si no es gratuita, no es libre.
—Estamos a la cola de Europa en educación, ¿qué falla?
—Los profesores echan la culpa a los padres, los padres a los profesores, los alumnos a los profesores, los profesores a los alumnos y todos les echamos la culpa, finalmente, a los políticos. ¿Cómo una sola persona o un pequeño grupo puede influir tanto sobre millones? Mi hermano me dijo una vez que educa la tribu. Y una tribu tiene sus sabios, pero cuando se escucha antes a Cristiano Ronaldo diciendo que está triste, a los “periodistas” del corazón, a los “periodistas” del misterio, cuando los niños ven “La que se avecina” y quieren ser de mayor como ellos, cuando Gandía Shore tiene más audiencia que mis vídeos… Hay muchísimas cosas que muestran a los niños el “lado oscuro”, el camino fácil, y siempre es más fácil ponerse a ver la tele que leer un libro con tu hijo. Y aún hay chavales que estudian, lo cual demuestra que son mucho más inteligentes de lo que algunos piensan. Si somos capaces de hacer entender a los alumnos que la mejor consola de juegos que tienen está sobre sus hombros, habremos ganado mucho camino. Se me olvidaba el ministro Wert… los que creen que es imposible no deberían molestar a los que lo estamos haciendo, señor ministro.