El jefe del Ejecutivo y candidato a la reelección, Pedro Sánchez, aspira a seguir gobernando en solitario desde la izquierda y no ve un problema en pedir la abstención de PP y Ciudadanos para que faciliten la formación del único gobierno posible, llegado el caso.
En una entrevista en RNE recogida por Europa Press, ha subrayado las dificultades de conformar un Gobierno estable con Unidas Podemos, ya que ninguna encuesta da a esta que sume la mayoría absoluta y, por tanto, una alianza así tendría que apoyarse necesariamente en los partidos independentistas, los menos indicados para aportar estabilidad.
Sánchez ha recordado cómo la rama de Podemos en Cataluña exige para desbloquear la situación "la liberación de los políticos presos catalanes", lo que el presidente tilda de "condición desafortunada" que demuestra "la seria discrepancia" del PSOE con los morados en relación a cómo resolver la crisis en Cataluña.
Así pues, ha señalado que el plan del PSOE es tener "un Gobierno progresista que dé una respuesta de izquierdas" a desafíos como el sostenimiento de las pensiones, la "reconstrucción" del Estado de Bienestar, el "enfriamiento de la economía internacional" o la "crisis de convivencia" en Cataluña.
Y ese Gobierno, ha señalado, ha de ser "coherente", lo que dificulta la coalición con una formación como Podemos, con la que existen "serias discrepancias" sobre Cataluña. Y debe ser estable, lo que no pasa por apoyarse en partidos independentistas, que precipitaron el adelanto electoral en abril al tumbar los Presupuestos.
A pesar de pronunciarse en este sentido, el lunes en el debate Sánchez evitó en varias ocasiones descartar una investidura que prosperase gracias a la necesaria colaboración de partidos independentistas, a pesar de que el líder del PP, Pablo Casado, le preguntó de manera reiterada por ello.
NO PUEDE HABER TERCERAS ELECCIONES
En opinión de Sánchez, el 11 de noviembre lo primero que tendrán que reconocer el resto de formaciones políticas es que el país no puede ir "a unas terceras elecciones" y que ha de encontrarse una solución que ponga fin al bloqueo. El líder del PSOE ha recordado la alternativa que propone él si no se llega a un acuerdo mejor: que se deje gobernar a la lista más votada.
Preguntado por las responsabilidades que asumiría en caso de empeorar los resultados obtenidos en abril, Sánchez ha considerado "raro" que se le pida esto a la formación que gana unas elecciones y sobre todo que esa demanda proceda de partidos como el PP, que se hundió hasta los 66 escaños en las pasadas elecciones.
Dicho esto, ha ironizado señalando que, aunque considera a Casado capaz de hacer "grandes proezas", no cree que vaya a "oradar aún más el mínimo electoral que tuvo el pasado 28 de abril".