El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha recordado este viernes que su partido ya exigió y consiguió la dimisión de un presidente autonómico imputado, el murciano Pedro Antonio Sánchez (PP), y actuará de la misma manera si alguien resultara imputado en el futuro Gobierno de la Comunidad de Madrid, donde la presidenta 'popular' Isabel Díaz Ayuso se enfrenta a informaciones periodísticas sobre su supuesta relación con la trama Púnica.
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, Villegas ha subrayado que el pacto firmado con el PP en Madrid --por el que ambos partidos gobernarán en coalición-- implica que "si hay un imputado por corrupción, se tiene que ir a casa".
Esto "nos da la tranquilidad para tirar hacia adelante este Gobierno de coalición", ha dicho cuando le han preguntado por Díaz Ayuso. Según se ha publicado, un informático hermano del supuesto 'conseguidor' de contratos de la trama Púnica dijo que ella era el contacto en el PP para los trabajos de mejora reputacional de Esperanza Aguirre en la campaña electoral de 2011.
Tras señalar que "se han producido casos en los que hay gente que se ha tenido que ir", ha atribuido a Cs la dimisión de Pedro Antonio Sánchez, que estaba investigado por delitos de corrupción, y también la de la expresidenta madrileña Cristina Cifuentes --que no había sido imputada-- y la renuncia de los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán a sus escaños en el Congreso y el Senado.
En Murcia, Madrid y Andalucía, Ciudadanos tenía firmados pactos de investidura con el PP y con el PSOE que establecían que aquellos cargos públicos que resultasen imputados por corrupción tendrían que dimitir.
"Allí donde Cs alcanza un acuerdo con el PP o con el PSOE, siempre cabe la posibilidad de que salga alguna trama de corrupción", pero, al mismo tiempo, las condiciones que impone en los acuerdos convierten a la formación naranja en "garante de la regeneración democrática", ha asegurado Villegas.
RECHAZA APLICAR EN CATALUÑA LA FÓRMULA DE NAVARRA SUMA
Por otro lado, ha vuelto a rechazar la idea del PP de aplicar en Cataluña una fórmula de colaboración electoral similar a la que Unión del Pueblo Navarro, el PP y Cs llevaron a cabo en Navarra, donde se presentaron juntos a las elecciones municipales, forales y generales en la coalición Navarra Suma.
El argumento de los 'populares' es que ellos fueron generosos en Navarra, una de las comunidades más difíciles para Ciudadanos desde el punto de vista electoral, y que el partido naranja debería serlo en Cataluña, donde ganó las elecciones mientras que el PP se quedó con un solo escaño en el Parlament.
Pero el secretario general de Cs ha indicado que las circunstancias en Navarra y Cataluña "son muy diferentes" y que en la Comunidad Foral, UPN fue el "catalizador" de la coalición electoral, que se materializó a través de dos acuerdos, uno con el PP y otro con Cs.
Además, considera que "no todas las coaliciones suman" votos, sino que "a veces resta". A su modo de ver, es bueno que Ciudadanos "tenga una propuesta propia" en los comicios y que "se presente con sus propias siglas", ofreciendo un proyecto reformista y con medidas de regeneración para "los españoles cansados del bipartidismo".