El Gobierno cree que es "imposible" que el carbón español pueda competir en los mercados internacionales y que es "muy dudoso" que las empresas españolas puedan competir en precios y calidad con la producción procedente de otros países como Australia, Colombia o Indonesia a la hora de suministrar a China o India.
Así lo pone de manifiesto en una respuesta escrita al diputado de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) por Asturias, Gaspar Llamazares, que en diciembre del año pasado registró una pregunta parlamentaria interesándose por saber por qué la Unión Europea y el Gobierno español tienen "tantas prisas en cerrar" las minas españolas a pesar de que las previsiones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) apuntan a que esta fuente de energía igualará en 2017 al petróleo gracias a la demanda de los países emergentes.
En su texto, que recoge Europa Press, el Ejecutivo señala que "si el pronóstico de la AIE se cumple, lo que dependerá de que China y la India continúen con las tasas de crecimiento económico de los últimos años y con niveles de consumo de carbón también crecientes" serán las empresas más competitivas --incluyendo las españolas-- las que puedan competir.
"Las empresas españolas que sean capaces de producir a costes internacionales tendrán un mercado al que ofertar. Sin embargo, es muy dudoso que las empresas españolas puedan competir con los precios y la calidad del carbón producido en otros países. Es imposible, con el nivel de calidad y precios del carbón español, competir en los mercados internacionales con el carbón de Australia, Colombia o Indonesia", insiste el Ejecutivo.
Con respecto a la decisión de Bruselas de acabar con los subsidios y cerrar las minas no rentables a partir de 2018, la respuesta parlamentaria defiende que "tras muchos años de dedicar ayudas al sector, éste debe empezar a funcionar de acuerdo con las reglas del libre mercado y basarse en su capacidad de competir con los precios internacionales".