Con la reunión en junio del Comité de Patrimonio de la Unesco como telón de fondo, el vicepresidente y el secretario de Icomos España, José María García de Miguel y Víctor Fernández Salinas, han incidido al Consistorio en la necesidad de emitir alguna “señal positiva ante la Unesco” o algún “signo de un cambio de actitud”, el primero de los cuales pasaría por “paralizar las obras del edificio”, así como otras soluciones menos drásticas como una “posible rebaja de su altura”, “compensaciones al promotor” o “una ampliación de la categoría de Patrimonio”.
Además, han subrayado la importancia de que todas las administraciones se unan para presentar ante la Unesco “una estrategia común”, tal y como explicó a Viva Sevilla, Fernández Salinas.
Esta iniciativa ha sido recogida por el Ayuntamiento, que ayer anunció, a través del delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, su intención de promover un encuentro a cinco bandas entre el Consistorio, Ministerio, Junta, Icomos y la promotora de la Torre Pelli, con el fin de dilucidar un posible enfoque del asunto de cara al Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco.
Vílchez, que recordó que el alcalde, Juan Ignacio Zoido, ya dirigió misivas al respecto al Ministerio y a la Junta “sin que se obtuviera respuesta clara sobre la situación que se planteaba”, señaló que van a “tomar la iniciativa otra vez”, ya que considera que la cuestión “no puede cargar sobre nosotros exclusivamente, sino que el resto de las administraciones que debían velar por la defensa del patrimonio tienen algo que decir”.
Papel de la Junta
En este contexto, Vílchez destacó el papel y la responsabilidad de la Junta de Andalucía en materia de patrimonio y señaló que “tiene mucho que decir” al ser la única administración que por ahora no ha cambiado su color político respecto al momento en el que se concedió la licencia de la obra del rascacielos, al tiempo que aludió al cambio en el sistema de propiedad del promotor.
Lamentando la condición “heredada” de la situación, el delegado de Urbanismo se hizo eco de una de las insistencias de Icomos que apunta a la Junta como principal garante del paisaje urbano, a la vez que insiste en que “debería haber tenido un papel relevante en la concesión de la licencia” de obras de la torre, así como que “nunca pusieron de manifiesto” la situación de “peligro” al iniciarse la construcción. Según Icomos, “si se decide la paralización” de la obra, la Junta “tendrá que hacer frente a sus responsabilidades”, aseveración que recordó Vílchez.
Confirmando que ante la Unesco se defenderá la condición de Patrimonio, Vílchez recordó que una paralización de las obras supondría una demanda de la promotora a la que el Consistorio “no puede hacer frente”.
PSOE critica los “pendulazos” de Zoido sobre la Torre Pelli
El portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento, Juan Espadas, criticó ayer los “pendulazos” del alcalde hispalense, Juan Ignacio Zoido, sobre su opinión en cuanto al desarrollo de la Torre Cajasol y espera que el primer edil sevillano “lidere” su defensa ante Icomos “sin titubeos”, ya que advierte de que “si no hay razones técnicas” para pararla, las razones “políticas costarán mucho dinero y Sevilla no se lo puede permitir”. Espadas advirtió que las maniobras llevadas a cabo por Zoido han sido “muy deficientes”, aunque subrayó la “prudencia” de sus declaraciones.
Así, insiste en que la defensa debe ser con argumentación técnica, teniendo en cuenta que “no hay argumentos técnicos sólidos” de la Unesco para parar la torre.
El concejal socialista critica así el “pendulazo permanente” del alcalde, que “pone en duda la legalidad de la torre y después dice que es legal”, entre otros, lo que “fragiliza” la posición del Ayuntamiento en la unión que debe formar con la Junta y el Estado.