La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado este sábado al cerrar el proceso de escucha con el que ha recorrido España bajo el lema "Sumar" que el millar de personas organizadas en 35 grupos de trabajo que la ha acompañado "tiene ya proyecto para ganar un país", un sueño, ha dicho, "en el que no sobra nadie".
"Tenemos ideas, imaginación, esperanza y queremos soñar porque cuando no se sueña no hay futuro. Ante un cambio de época, tenemos que cambiar las políticas públicas. Queremos cambiar España con diversidad y acentos propios. Necesitamos a todo el mundo, esto no va de ganar unas elecciones, sino de ganar un país, y para eso no sobra nadie", ha aseverado Díaz.
En su intervención final en el único acto de Sumar celebrado en Canarias, y al que seguirá el próximo domingo en Madrid la presentación oficial de su candidatura a la Presidencia del Gobierno español, Díaz ha recalcado que a este proyecto es bienvenido todo aquel que quiera sumar, "piense lo que piense, porque no se le pide carné a nadie".
Yolanda Díaz ha subrayado que la misión que se plantea Sumar es "atender a la gente que está afuera", no hablar de sí mismo, por lo que ha recalcado que "no se gana un país defendiendo una mesa camilla y hablando de listas electorales".
Ante más de medio millar de personas que abarrotaban el salón del Círculo Mercantil de Las Palmas de Gran Canaria, entre las que se encontraban representantes de Equo, Proyecto Drago, Podemos, Reunir, Izquierda Unida y Los Verdes, además de los sindicatos CCOO y UGT, Díaz ha dicho que "lo importante es demostrar a este país que aunque tengamos matices, la diversidad es riqueza".
"No nos quieren pensando lo mismo, nos quieren caminando juntas", ha aseverado para asegurar que si "demostramos, también en Canarias, que estamos a la altura del tiempo histórico que nos ha tocado vivir, vamos a conseguir ganar el país, ser felices y querer a la gente".
Yolanda Díaz ha recordado que su proceso de escucha comenzó en su tierra, Lugo, la periferia de España, de la que se siente muy orgullosa, y ha asegurado que ha querido que culmine en Canarias, la ultraperiferia de la UE, una tierra diversa de la que también ha dicho estar muy orgullosa y a la que vino durante la pandemia, ha dicho, "cuando creía que era importante, no a firmar el plan de empleo de La Palma".
La ministra de Trabajo ha resaltado que el Gobierno de España ha defendido a Canarias cuando su turismo cayó con más de 4.000 millones de euros que han servido para que el 38 % de los trabajadores de las Islas se pudieran acoger a un ERTE, si bien ha estimado que "no es decente" que en esta región el paro juvenil, que se ha reducido en 10 puntos en esta legislatura, siga siendo del 39 % "por políticas públicas de los siglos XX y XXI que han decidido la dependencia de un único sector productivo: el turismo", mientras la industria representa solo el 5 % del PIB.
Díaz ha celebrado Canarias tenga el mayor número de ocupados de la historia, cerca de un millón de personas, y que registre también récord de trabajadoras, si bien ha considerado que "queda muchísimo por hacer", ya que persiste la enorme debilidad de su economía, por lo que Sumar "defiende un modelo productivo diferente, también para Canarias, que genere riqueza de manera democrática y sea respetuoso con el medio ambiente".
"Queremos ser un país comprometido con la descarbonización de la economía y el fomento de las energías renovables, ahora bien, también queremos que ese modelo sea democrático, no oligopólico porque tres grandes multinacionales se están haciendo de oro" con esta necesaria transición, un sector, ha dicho, en el que también hay que empezar a hablar de creación de empleo.
A juicio de Yolanda Díaz, "claro que Canarias tiene todo el futuro que se le quiera dar, pero tiene que ir cerrando brechas y desigualdades´, decidiendo con recursos públicos un cambio de modelo productivo que respete su singular cultura".