El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, prevé presentar una querella en las "próximas semanas" por el caso del supuesto espionaje político a través del sistema Pegasus, respecto al que ha avisado al Gobierno de que "la estabilidad parlamentaria es muy difícil si no se asumen responsabilidades".
En una entrevista con elDiario.es, Aragonès ha explicado que los equipos jurídicos están "estudiando las vías judiciales que se podría abrir para llegar hasta el fondo del asunto", ya que se trata de un caso "complejo", pero ha confirmado que él llevará su caso ante la justicia, en la línea de otros dirigentes independentistas.
"Estamos trabajando para presentarlas (las querellas) en las próximas semanas", ha señalado el presidente catalán. "Vamos a llegar hasta el final, a usar todos los medios de defensa legal a nuestro alcance, porque se han vulnerado derechos básicos", ha aseverado Aragonés, que denuncia: "Nos están diciendo que los derechos fundamentales son incompatibles con la unidad de España".
El también coordinador general de ERC ha advertido al Ejecutivo central de que "la estabilidad parlamentaria es muy difícil que pueda continuar si no se asumen responsabilidades" por parte de Moncloa.
"Lo más importante es la asunción de responsabilidades y que se lleve a cabo una comisión de investigación con todas las garantías en el Congreso. A partir de ahí, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha demostrado su incapacidad para gestionar una situación de este tipo", ha señalado Aragonès.
El mandatario catalán ha considerado que se deben "restaurar las condiciones mínimas de confianza para llegar a acuerdos", también en la mesa de diálogo Estado-Generalitat, ahora congelada: "Nosotros no nos vamos a levantar nunca de la mesa, pero es imprescindible, si se quiere que la mesa avance, que se den unas condiciones, que no dependen ahora del Govern de Cataluña, sino del Gobierno".