La antigua N-IV no mantiene un nivel adecuado de mantenimiento, y lo peor es que hay ciertos tramos que no pasan el examen de los conductores, debido a que están totalmente llenos de socavones, como ocurre a la altura del semáforo peatonal que se encuentra ante el instituto Antonio de la Torre, donde se encuentra el concesionario de la marca Toyota.
Sobre todo en el sentido Jerez-Cádiz, la carretera está llena de “molestos” e “incómodos” socavones, según los califican los conductores, que hacen que “si los esquivas tengas que tener cuidado con los coches que van en el otro carril” o bien “que tengas que sobrepasarlos, con lo que conlleva para los neumáticos del coche”, explica un conductor afectado que toma esta vía y ese sentido de la circulación a diario para ir a trabajar.
Por otro lado, los conductores critican que la situación de lluvia de estos días no está ayudando, puesto que los socavones se abren por día y se vuelven más peligrosos, aunque a simple vista “parezcan pequeños agujeros, en realidad son ya unos socavones de dimensiones importantes que se deben arreglar” y sobre todo “cuanto antes mejor”, explican a este medio.
Por ello, exigen al equipo de Gobierno que actúe de forma inmediata para acabar con estos problemas que presenta la N-IV, porque “es una vía de mucho tráfico diario y de mucha circulación como para que no se gestionen los imprevistos que puedan surgir”. Aunque, a decir verdad, “no son pequeños imprevistos que van surgiendo, sino problemas que cada vez se van agrandando más y más y que no se han solucionado”, apuntan los conductores.
Además, estos conductores también señalan que se hacen distintos trabajos en la propia avenida, como la poda de arbustos o la eliminación de las hierbas de la mediana, pero en cambio no están actuando en los problemas que surgen desde hace meses como son los socavones en el asfalto.
Por otro lado, indican que estas últimas semanas se ha gestionado la construcción de la zona de aparcamiento de la barriada de El Juncal, “lo que se podría haber aprovechado para tapar los agujeros que tanto llevan en la antigua N-IV y que nos crean tanto quebraderos de cabeza a los conductores”.
Por todo ello, los afectados por estos socavones consideran que el alcalde, David de la Encina, debería tomar cartas en el asunto para que estos agujeros se eliminen cuanto antes del asfalto, así como exigen que se solucionen otros problemas añadidos como errores en los semáforos o el alumbrado público.
