La presentación de este compromiso ciudadano será el próximo sábado 22 de noviembre en El Puerto en la Casa de los Toruños.
En los últimos meses, diversas organizaciones y plataformas de la sociedad civil de todo el estado vienen reclamando la necesidad de un cambio de modelo de gestión del agua urbana que sea pública, democrática y participativa, basado en criterios de equidad social y con el máximo respeto a los derechos humanos. De cara a las próximas elecciones municipales, Asociaciones vecinales, de consumidores, ecologistas, científicas, y operadores públicos y de otros ámbitos ultimamos el contenido del Pacto por el Agua Pública basado en un modelo 100% público de los servicios básicos de competencia municipal, como es el suministro de agua, que garantice una calidad de vida digna para todos los ciudadanos y ciudadanas. Marea Azul del Sur y AEOPAS colaboran para llevar a todos los municipios de Andalucía este pacto, y el próximo sábado 22 de noviembre se presentará en El Puerto de Santa María a iniciativa de la Plataforma Ciudadana APEMSA NO SE VENDE La idea del Pacto nace en Andalucía y tiene su precedente en la ciudad de Zaragoza, donde casi una veintena de entidades han firmado un compromiso para dejar el agua al margen de las leyes del mercado. Organizaciones ciudadanas, ecologistas y otras plataformas andaluzas, así como partidos políticos, preparamos ya una propuesta similar, un pacto para que este recurso esté siempre en manos 100% públicas. Situación que ya se ha expandido, poco a poco otras zonas del Estado (Murcia, Castilla-La Mancha, Cataluña) Esta iniciativa que denominamos #iniciativagua2015, defiende el carácter del suministro como derecho humano, en línea con la declaración de Naciones Unidas y con la primera iniciativa ciudadana promovida en la UE, intenta prohibir los cortes, asegurar un mínimo de entre 60 y 100 litros por persona y día en caso de impago justificado, eliminar la participación de la empresa privada, garantizar tarifas sostenibles, asegurar que el dinero del agua se reinvierta solo en este ámbito, aumentar el control social sobre los recursos, el respeto al medio ambiente, que la gestión del suministro también sea un elemento de creación de empleo e incluso promover el consumo del “grifo” frente a la comercialización de botellas. Con la adhesión al Pacto, los grupos políticos y plataformas ciudadanas se comprometerán a gestionar el agua bajo los criterios de sostenibilidad social, económica y medioambiental. Se opondrán a la privatización del agua e impulsarán políticas de trasparencia y participación social en la gestión del agua.