Era una de las premisas que desde la Federación Andaluza de Fútbol insistía para que el Racing Portuense pudiera normalizar la situación de desamparo y caos en la que había quedado tras la renuncia de la junta gestora. “El único problema que tiene el club es el vacío de poder; si arreglan eso e inscriben al equipo, no veo problemas al respecto”. Eran palabras del responsable de Prensa de la Andaluza, Rafael Jiménez, a este periódico semanas atrás.
Ahora toma todo su sentido tras los movimientos producidos en la intención de retomar la normalización institucional. Con el primer paso dado y con el OK federativo, el siguiente es zanjar la deuda resultante con los jugadores que denunciaron ante las nóminas impagadas.
Aunque en un primer momento la cantidad que se llegó a barajar por parte del club estaba fijada en 20.492 euros, los 16.650 que notificó entonces la Andaluza, finalmente, quedará en algo más de 14.000 euros. Cantidad sensiblemente inferior respecto a la primera y a la segunda, según se desprende de la documentación que maneja la Concursal.
Acto seguido, la primera intención es negociar con la Federación dado que en la cuenta federativa que posee el club, el Racing Portuense tiene dinero que podría ser utilizado para hacer frente a dicha deuda. Para el caso de que ésta repitiese el mismo argumento como el que ha venido empleando durante toda la temporada, es decir la omisión o la negativa por respuesta, se procedería a activar otras alternativas con las que se está trabajando.
Tras este paso esencial, se desprende de esta forma, la existencia de un plan de actuación para que el equipo pueda competir la venidera temporada.