El francés Antoine Griezmann, delantero del Atlético de Madrid, dijo que espera regresar a la final de la Liga de Campeones, porque "no hay dos sin tres", admitió la dureza de la derrota "en lo emocional" y remarcó que son "momentos difíciles" y "hay que olvidar lo más rápido posible".
"Es el partido más duro en lo emocional, junto con los cuartos de final del Mundial", dijo el futbolista en zona mixta, donde apuntó: "Creo que hace dos años (en Lisboa) fue más duro. Al final hoy lo dimos todo, en la tanda de penaltis es quien tiene más suerte".
Al término del encuentro, el atacante afirmó que Simeone "no habló mucho en el vestuario, sólo descansar, pensar y ya está" y, sobre sus palabras en rueda de prensa, donde el técnico dejó en el aire su continuidad porque es momento para pensar, Griezmann valoró: "No ha dicho nada. Todo el mundo está triste, dolido, no son momentos para hablar. Él nos ha dado todo y luego ya verá que hará".
A su equipo, según opinó, le faltó "suerte, meter gol y crear ocasiones" en la final de la Liga de Campeones. "Son momentos difíciles, hay que olvidar lo más rápido posible", concluyó.