El Almacén Centralizado de El Cabril, que gestiona la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) en el término municipal de Hornachuelos (Córdoba), recibió en 2012 un total de 2.892,63 metros cúbicos de residuos radiactivos: 564,61 de baja y media actividad y 2.328,02 de muy baja actividad.
Estas cantidades, según ha informado Enresa durante su VI Jornada de Comunicación en la propia instalación de El Cabril, suponen un 32,37 por ciento más de volumen de residuos recibidos respecto al año anterior y sitúa a 2012 como el segundo año en que más residuos se recibieron en la instalación cordobesa tras 1998, cuando se almacenaron 3.207 metros cúbicos.
Con el volumen recibido en 2012, la capacidad para almacenamiento de baja y media actividad se encuentra al 67,50 por ciento, mientras que la primera estructura para residuos de muy baja actividad se encuentra al 16,87 por ciento. Así lo constata el informe anual de la instalación cordobesa, presentado a los medios de comunicación por la directora del almacén, Eva Noguero.
En concreto, los residuos radiactivos llegaron a la instalación en 278 expediciones: 140 de ellas fueron de residuos de baja y media actividad y 138 de muy baja actividad.
En total, desde enero de 1986, cuando comenzó a operar El Cabril, hasta diciembre del pasado año, la instalación cordobesa ha acumulado en sus celdas de almacenamiento un total de 36.613,325 metros cúbicos de residuos radiactivos, lo que hace que en la actualidad haya 18 estructuras de almacenamiento de residuos de baja y media actividad llenas, dos en operación y tres ocupadas temporalmente con residuos procedentes de incidentes en acerías.
Respecto a los residuos de muy baja actividad, la primera estructura específica, la denominada celda 29, se encuentra al 16,87 por ciento y la instalación presentó el pasado mes de agosto la documentación de licencia para construir la siguiente estructura para este tipo de residuos.
La actividad de El Cabril ha estado sometida, entre otros controles, al Plan de Vigilancia Radiológica Ambiental (PVRA), que en 2012 recabó 1.046 muestras de agua, aire, sedimentos, alimentos, etcétera, para certificar el nulo impacto radiológico de El Cabril en su entorno.
Por otro lado, El Cabril continuó siendo en 2012 un foco de interés público, al recibir 4.445 visitantes entre los que se encontraban estudiantes, vecinos, profesionales de los medios de comunicación, representantes institucionales y técnicos de distintos países del mundo.
ENSAYO DE CAPAS DE COBERTURA
Además de conocer los datos operativos de la instalación en 2012, los asistentes a la VI Jornada de Comunicación de Enresa han podido conocer 'in situ' el ensayo de capas de cobertura que Enresa desarrolla en la instalación desde 2009 y que tiene como objetivo evaluar el comportamiento de dos variantes, a escala, de la cobertura que se construirá sobre las estructuras de almacenamiento de residuos.
Tal y como ha explicado el responsable del proyecto, Manuel Ordóñez, este ensayo ha permitido adquirir experiencia previa, al proporcionar un conocimiento real sobre la construcción de la misma. Asimismo, servirá para definir aspectos del diseño de detalle de la cobertura, que es una de las barreras del sistema de almacenamiento de residuos y el elemento final que permite que El Cabril recupere su aspecto original.