El delegado municipal de Hacienda, Joaquín Guerrero, y el delegado municipal de Medio Ambiente y vicepresidente de Chiclana Natural, Roberto Palmero, han comparecido en rueda de prensa para explicar la propuesta que desde el Gobierno municipal llevarán a un Pleno Extraordinario sobre la modificación de las Ordenanzas Fiscales, que se celebrará la próxima semana. En este sentido, Guerrero ha indicado que, “tras aprobarse en Pleno en 2012 un Plan de Ajuste a fin de garantizar el pago de los préstamos que había pedido el PP a los bancos y, sobre todo, tras la medida electoralista del PP de bajar el IBI un 29 por ciento en 2014, que provocó que la ciudad comenzara a tener números negativos y se empezara a recortar en los servicios a la ciudadanía, especialmente en inversiones, en jóvenes, limpieza viaria, mayores, mujer, vecinales y en todo tipo de colectivos, viéndonos obligados a mendigar a la Junta de Andalucía y al Gobierno de España para que no nos intervinieran las cuentas municipales y llevándonos a una situación de riesgo financiero, con ahorro neto negativo, incumplimiento de la regla del gasto, endeudamiento por encima del 110 por ciento, nos vimos en la obligación de tener que aprobar un Plan Económico y Financiero para tratar de enderezar las maltrechas cuentas heredadas del PP”.
“Gracias a la buena gestión del equipo de Gobierno municipal durante el anterior periodo corporativo, mejoró la situación económica. Sin embargo, ahora pretendemos acometer más inversiones en servicios públicos, en buscar soluciones en materia de vivienda, en empleo y también en cumplir con bancos y proveedores y realizar políticas sociales”, ha expresado el delegado de Hacienda, quien ha indicado que “eso nos lleva a tener que aplicar una subida del IBI vinculada al IPC, que ronda en los últimos seis años alrededor del 3,5 por ciento, más un 5,5 por ciento, lo que supone un incremento del 9 por ciento”.
Asimismo, Guerrero ha aclarado que, “si actualmente vamos cumpliendo con la ciudadanía es gracias a la moratoria en el pago de las amortizaciones de los préstamos establecida por Pedro Sánchez, pero ese período de carencia finaliza en 2021 y con los ingresos actuales se plantea una situación muy difícil que tenemos que afrontar desde este momento. “Y si a todo lo anterior le unimos los pagos que en materia salarial hemos tenido que proceder a su aprobación y que supone un 6 por ciento en tres ejercicios, y lo que nos tiene que venir para los próximos años, es imposible cumplir debidamente sin recursos económicos suficientes. Además, no podemos olvidar que estamos obligados a reducir en tres ejercicios el remanente negativo de tesorería que a día de hoy se sitúa en más de 10 millones de euros y que llegó a ser de 16 millones”, ha incidido.
“Por ello, planteamos para este próximo ejercicio una recuperación de una pequeña parte de los ingresos que nos fueron arrebatados en 2014 y 2015, que en realidad se trataría de una cuantía poco significativa para un recibo medio de IBI”, ha expresado el responsable del área. En este sentido, a modo de ejemplo, indicar que una vivienda que paga 300 euros de IBI en la actualidad, tendrá un incremento el próximo año de 27 euros, “es decir, poco más de 2 euros al mes”. “No obstante, debemos aclarar que una vivienda en una zona céntrica de Chiclana que pagaba en 2013 de IBI 612 euros, el próximo año pagará 557,62 euros, es decir, cerca de 60 euros menos que hace siete años . Y si otra vivienda por la zona de La Banda pagaba en 2013 un total de 989,54 euros de IBI, el próximo año pagará 917,78 euros, es decir, 75 € menos que hace siete años, teniendo en cuenta además, que la vida en este periodo se ha encarecido un 3,1 por ciento, según marca el INE”, ha comparado Joaquín Guerrero, quien ha añadido que “las zonas más valoradas y por tanto, más caras de Chiclana, pagarán significativamente más que las más humildes de la ciudad. En resumidas cuentas, pagará más quien más tiene”.
Por otro lado, si llevamos la comparación a distintas localidades vecinas, aún es más notable la diferencia existente, ya que en Cádiz, por ejemplo, el tipo de gravamen del IBI para bienes inmuebles urbanos aplicable es el 0,84, mientras que en Chiclana será el 0,5, lo que supone 3 décimas menos; mientras que en El Puerto de Santa María el tipo de gravamen de IBI actual para bienes inmuebles urbanos es el 0,75 y en Chiclana para el próximo año va a fijarse en el 0,5 y el tipo de gravamen para bienes rústicos se prevé en El Puerto en el 0,75 y en Chiclana en el 0,6, todo ello teniendo los mismos servicios una ciudad que otra y necesitando, por tanto, los mismos medios económicos una que otra. “En definitiva, estamos lejos de recuperar el nivel de ingresos que tuvo nuestro Ayuntamiento hace seis años y seguiremos muy por debajo de otras ciudades del entorno como Cádiz o El Puerto de Santa María”, ha destacado.
“Solo con esta medida prevista vamos a afrontar un futuro que plante cara a la herencia de la nefasta gestión que nos dejó el PP al frente de las cuentas municipales y poder realizar políticas adecuadas de empleo, de vivienda, de mejora y limpieza de nuestras calles, de protección y ayuda a todos los colectivos asociativos, de jóvenes, mayores y políticas de mujer, y atendiendo de forma especial, a los más desfavorecidos”, ha insistido Joaquín Guerrero, quien ha añadido que “son muchos los años que no hemos podido llevar a cabo inversiones en nuestra ciudad y tenemos el objetivo de mejorar los servicios públicos que el PP quiso desmantelar, afianzando nuestra economía sin dejar de atender a las demandas sociales de nuestro pueblo”.
Tasas de agua y residuos
Por su parte, Roberto Palmero ha indicado que “desde este verano estamos trabajando en las tasas de agua y residuos, teniendo en cuenta las mejoras de estos servicios, más aún ahora que afrontamos el reto de la regularización de viviendas. Además, debemos tener en cuenta que estas tasas que, en función de la nueva Ley pasan a ser prestaciones patrimoniales de carácter público no tributarios, debemos ajustarlas a la nueva situación de la ciudad para tener un servicio más sostenible, tanto económica como ambientalmente, así como para cumplir en el pago a proveedores, la gran mayoría de Chiclana”. Para ello, se pondrá en marcha un proceso de consulta ciudadana, a través de la página web de la empresa Chiclana Natural, informando sobre los servicios que se prestan actualmente y reclamando la participación de colectivos y ciudadanía en general sobre dichos servicios y qué medidas llevar a cabo de cara a los próximos años.
“En base a las aportaciones que presenten los ciudadanos, plantearemos las medidas a llevar a cabo con estos servicios y, por supuesto, desarrollaremos las Ordenanzas Fiscales, que se llevarán a aprobación antes de que finalice el presente año”, ha indicado el vicepresidente de Chiclana Natural, quien ha añadido que “las tasas resultantes de este proceso participativo se destinarán íntegramente a los servicios que se lleven a cabo”. “Nosotros, como administración, podemos tener una serie de prioridades, pero lo mismo la ciudadanía puede tener otras prioridades”, ha recalcado.