El alcalde de Chiclana, Ernesto Marín, acompañado por la delegada de Igualdad, Ana María Bertón, así como de diferentes miembros del equipo de gobierno, ha inaugurado en la barriada de El Mayorazgo una plaza dedicada a la chiclanera Remedios Sánchez Benítez “Remeditos”, un acto que se enmarca en el conjunto de actividades que se están desarrollando con motivo del Día Internacional de la Mujer.
En su intervención, Ernesto Marín ha felicitado tanto a la familia de Remedios Sánchez como a la Delegación de Igualdad “por haber acertado de lleno de nuevo en la elección de esta grandísima mujer galardonada. Porque considero que la valía de las acciones de las personas no solo debe evaluarse sobre los hechos en sí, sino también en el contexto histórico, económico y social que los rodean. Y por eso, la labor educativa de Remedios Sánchez cobra un protagonismo esencial, dado que inculcó conocimientos y valores cuando más difícil resultaba hacerlo y se rebeló con valentía ante las injusticias que le rodeaban”.
Por su parte, la edila de Igualdad ha hecho hincapié en que “a menudo, las chiclaneras han sido marginadas de la “historia oficial” de nuestra ciudad, relegando a un segundo plano a grandes mujeres que contribuyeron de forma decisiva a construir la sociedad y la idiosincrasia de Chiclana”. Para añadir que “por eso, cada día que pasa, nos esforzamos por añadir nuevos nombres a la genealogía del papel de la mujer en nuestra ciudad, reconociendo la labor de importantes mujeres, como hicimos en 2012 con Mónica Aragón Aragón “La Mónica” o el pasado año con Antonia Torres Pinto “La Topa”.
Por todo ello, ha subrayado que “solo desde la reflexión de los colectivos de mujeres, con la complicidad de los hombres, podemos pasar a la acción y escribir páginas de la historias con nombres de mujeres chiclaneras”.
Remedios Sánchez Benítez nació en Chiclana el 18 de abril de 1912. Desde muy joven tuvo vocación educativa y con tan solo 18 años emprendió su primer negocio, la apertura de la guardería “Miga”, situada en la calle Palomar, para trasladarse posteriormente a la Alameda del Río.
Cobraba una pequeña cuota a todos los alumnos a los que ofrecía sus servicios, aunque no dudó en múltiples ocasiones en ejercer la educación gratuita a aquellos hijos e hijas de padres con escasos recursos económicos.
Contó siempre con la perenne ayuda de su hermana Josefa y aún con la guardería en marcha, alternaba esta labor con otros oficios complementarios para poder salir adelante.
Se estima que dos generaciones de chiclaneros han pasado por las aulas de la guardería “Miga” durante varias décadas y eso propició que en 1987 recibiera la Medalla de Oro de Chiclana, un galardón que ella misma donó a la Hermandad de la Virgen de los Remedios.
“Remeditos” falleció en Chiclana el 31 de marzo de 2013, a la edad 101 años.