El alcalde de la ciudad, José María Román, ha visitado la carretera de Las Lagunas, con motivo de la finalización de las obras que se han realizado para la reconversión de esta vía. Una visita en la que ha estado acompañado por la delegada municipal de Fondos Europeos, Ana González; la delegada municipal de Mantenimiento Urbano y Energía, Mª Ángeles Martínez Rico; el delegado de movilidad, Jose Vera; el representante de Garrucho, Antonio Garrucho, y el jefe de servicio de la Delegación Municipal de Mantenimiento Urbano y Energía, Pablo Blanco.
José María Román ha expresado que son “muchas las satisfacciones y alegrías” que producen la ejecución de una obra de estas características. Además, ha agradecido el buen trabajo realizado por la empresa Garrucho SA, “porque en tiempo récord ha realizado una obra muy compleja y porque en ningún momento se ha cortado el tráfico de forma íntegra”.
“Se trata de un de las arterias principales del municipio, como eje vertebrador entre las carreteras de Carabineros, Molino Viejo y carretera de La Barrosa”, ha incidido el alcalde, explicando que estos trabajos también han incluido la colocación de arbolado y de carriles de incorporación en las glorietas del Atún y del Vino en El Florín. Además, José María Román ha hecho hincapié en la importancia de las inversiones que se hacen en la ciudad gracias a los Fondos Europeos, en este caso a la Zona de Bajas Emisiones, “que tanta crítica ha recibido, pero que nos ha permitido realizar obras tan importante como esta, como la de las calles Arroyuelo, Iro, Fierro o la Estación de Autobuses”.
En el caso de la avenida de la Rana Verde ha reseñado que se trata de una inversión muy importante, “que pone de manifiesto el crecimiento y las buenas acciones que se vienen realizando y se seguirán realizando en esta zona, como es la carretera de Fuente Amarga, y en el resto de la ciudad. Con actuaciones como esta podemos decir que merece la pena trabajar por la transformación en positivo de toda la ciudad, gracias a la colaboración de muchísimas personas, gracias a una buena planificación y a una buena ejecución de la obra”.
Antonio Garrucho ha explicado que su objetivo es siempre ejecutar las obras lo mejor posible y lo más rápido que puedan. Uno de los ejemplos en esta obra ha sido que los trabajos de asfaltado los han realizado siempre de noche para no interferir en demasía en el tráfico de la zona.
Pablo Blanco ha explicado que los objetivos de este proyecto eran la reducción de tráfico, eliminar la problemática de las cunes, la congestión del tráfico en hora punta y en verano, así como introducir en esta vía el nuevo paradigma de movilidad, con el peatón y el ciclista, dando espacio a todos y con una zona arbolada. “Era algo complejo, porque también se necesitaba el ensanche de la vía. Tras la realización de estas obras contamos con cuatro kilómetros de carriles bici, 13.500 metros cuadrados de acerado, cuatro carriles, dos rotondas y un carril de aceleración. Estamos muy satisfechos por haber podido cumplir con los objetivos marcados”, ha señalado.
Estas obras las ha ejecutado la empres Garrucho SA y se adjudicaron por 2.263.668 euros, de los que 1.683.720 euros se incluyen en la convocatoria de Zona de Bajas Emisiones 2022 dentro del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea con cargo a los fondos Next Generation EU, y el resto ha sido financiado por el propio Ayuntamiento y Chiclana Natural. Las obras comenzaron en junio de 2024.
Se ha procedido a la reconversión de esta carretera en una amplia avenida con cuatro carriles, así como la creación de acerado y el soterramiento de las cunetas que existían, carril bici, además de las dos rotondas en las confluencias con los callejones Rueda la Bota y La Pedrera. Todo ello, con la iluminación y las canalizaciones de pluviales correspondientes.
