Si el viernes el Concert Music Festival se llenaba de un público joven y mayoritariamente femenino deseoso de bailar, saltar y sudar al compás de los temas del artista colombiano Maluma, en la noche del sábado la tónica era bien distinta en ese mismo enclave, destacando la presencia de un público de edad madura y predominantemente extranjero. El causante de ello: el rockero canadiense Bryan Adams.

Pero como en la variedad está la diversión. Si felices fueron los fans de Maluma, no menos lo serían los de Bryan Adams, máxime cuando se sabían unos privilegiados por poder disfrutar del único concierto que esta leyenda del rock ofrecía en Andalucía y del último en España antes de regresar a Canadá.

Pues sí, el público selecto que se dio cita en el Concert Music Festival fue tan feliz que dolía, o lo que es lo mismo So happy it Hurts, como se denomina la gira del cantante canadiense.

Bryan Adams inició su espectáculo puntualmente con un vídeo en blanco y negro, al que siguió el tema Kick Ass, con el que dio el pistoletazo de salida.

Acompañado de su guitarra y con un look sencillo sin estridencias, de pantalón y camiseta negra, interpretó temas de su último trabajo, como Shine a Light,  e hizo un repaso por algunos de sus grandes éxitos, como Heaven, Have you ever really loved a woman o Everything I do, I do it for you, entre otros muchos.

En un español de nivel principiante, el artista se presentó entre bromas: “Hola amigos y amigas, me llamo Bryan y soy su cantante por la noche. Turn the lights on”.



Durante las casi dos horas que duró el concierto, el cantante canadiense también cedió el protagonismo a algunos de sus músicos, que brillaron tanto como él a la guitarra, a la batería o al piano. También brilló y se lució su público, al que proyectó en numerosas ocasiones en las tres grandes pantallas que le acompañaban en el escenario.

Go Down Rockin, It’s only love, You belong to me, Here I am, When you’re gone, Back to you, 18 til I die o Run to you fueron también parte de la banda sonora de la noche más ochentera vivida en el Concert Music Festival.

Bryan Adams se despidió de su gira española brillando como solo un artista de su nivel sabe hacer. Y por si el recuerdo de la noche vivida no hubiera sido suficiente para los fans, el cantante canadiense lanzó y regaló a los asistentes las púas que había utilizado para tocar la guitarra y las baquetas empleadas por el batería. Y quien tuvo la suerte de hacerse con ellas, siempre podrá pensar: Tócala otra vez, Bryan.