“Hay una gran preocupación ante la posibilidad de que las distintas instituciones y organizaciones busquen soluciones individualizadas”, señaló la ministra en declaraciones que publicó el rotativo Süddeutsche Zeitung.
La ministra se refiere así a la iniciativa de la Compañía de Jesús para compensar con una reparación de 5.000 euros a las 205 víctimas conocidas de abusos sexuales cometidos por religiosos en centros educativos de Alemania, en la mayoría de los casos hace ya décadas.
“La Iglesia Católica, como institución mas afectada, debe aportar dinámica al debate”, comentó Leutheusser-Schnarrenberger, quien pese a todo considera ya positiva la disposición de los jesuitas de crear un fondo de reparaciones.
Asimismo advirtió contra la posibilidad de que ese fondo común de las instituciones católicas para compensar a la totalidad de sus víctimas de abusos sexuales no llegue a crearse.
En parecidos términos se expresa la comisionada del Gobierno federal para los casos de abusos sexuales,
Christine Bergmann, quien tiene intención de presentar una propuesta concreta de indemnizaciones a comienzos de marzo ante la mesa redonda creada para buscar soluciones al escabroso tema.
Aunque cada institución es libre de ofrecer indemnizaciones a las víctimas por los daños sufridos, la meta debe ser que no existan diferencias en el trato de los afectados a la hora de ofrecerles ayudas y terapias, señaló Bergmann en el mismo rotativo.
Las víctimas de abusos sexuales cometidos por miembros de la Compañía de Jesús en Alemania rechazaron ayer por insuficiente la oferta de compensaciones económicas anunciada por los jesuitas para paliar los daños sufridos.
En declaraciones a la prensa, Thomas Weiner, portavoz de los afectados representados por el grupo Eckiger Tisch, dijo que la oferta de 5.000 euros para resarcir a las víctimas.
