España y todo el entorno iberoamericano deben reivindicar y defender una “cultura institucional compartida” que tiene entre sus pilares el municipalismo, la universidad y la rendición de cuentas. “Estas tres instituciones son de raíz hispánica y sin ellas no se podría entender la libertad en América”, ha afirmado el rector de la Universidad de Salamanca, Ricardo Rivero, como ponente de la sesión plenaria «Lengua, política, derecho e instituciones públicas: La idea de globalización en el mundo hispánico», con la que ha arrancado en Cádiz la tercera jornada del IX Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE).

Rivero, catedrático de Derecho Administrativo, ha hecho referencia a la reciente Cumbre Iberoamericana para hacer una reflexión sobre el lenguaje de la política y el poder. “Todavía en el siglo XXI hay quien siente la tentación de hacernos confundir las palabras ‘democracia’, ‘autocracia’ y ‘dictadura’. Si no sabemos distinguir la diferencia tenemos un grave problema”, ha señalado el rector salmantino, cuya intervención ha sido presentada por la académica Susana Cordero de Espinosa, directora de la Academia Ecuatoriana de la Lengua.

“Una de las tradiciones hispánicas que compartimos es la posibilidad de que quienes ejercen el poder en algún momento paguen por sus excesos. Da igual si son responsables del siglo XVI como Hernán Cortés o tiranos del XXI que siguen vulnerando los derechos fundamentales, matando o permitiendo el asesinato de periodistas”, ha enfatizado el rector de la USAL, la universidad más antigua de España y muy volcada en la enseñanza del castellano para alumnos extranjeros.

En esta línea, ha hecho un recorrido por figuras destacadas de la historia, desde José Celestino Mutis al famoso «Sermón de Adviento»del fraile Antón Montesino, pasando por autores como Gioconda Belli, Mario Vargas Llosa o los poetas Raúl Zurita y Rafael Cadenas. “Todos ellos han defendido los derechos y la libertad y lo han hecho en la lengua que compartimos”, ha destacado.

Otra de las herencias institucionales compartidas, ha continuado Rivero, es la del municipio. “Sin los cabildos, auténticas escuelas de democracia que toman su modelo de los códigos hispánicos de las partidas y leyes de Toro de los códigos hispánicos que proclamaban el autogobierno municipal probablemente no hubiera surgido una clase política con capacidad de gobierno que después proclama su derecho a la independencia”, ha argumentado Rivero.

“Todo eso -ha continuado- nace de las universidades que crea España en América, de un modo muy temprano y contra la tendencia de otras potencias hegemónicas de aquel tiempo”, que no hacían lo mismo en los territorios que controlaban. En este punto, el rector salmantino ha hecho una defensa de la autonomía universitaria.