“Nuestras unidades al cargo del cumplimiento de las buenas prácticas religiosas han arrestado a docenas de residentes por haberse afeitado la barba, algo prohibido por el Estado regional islámico”, dijo el jefe de la policía local, Abu Hureyra Abdurahman.
Tanto Kismayo como gran parte de Somalia está bajo control de Al Shabab, opuesto al gobierno federal de transición somalí. Según el diario Mareeg, Al Shabab ordenó en diciembre que todos los hombres de la ciudad se afeitaran el bigote y dejaran crecer la barba.