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Barbate

El mejor homenaje al Atún Rojo

Para honrar al manjar que es el atún rojo, 39 restaurantes de Zahara de los Atunes y Atlanterra participan en el concurso de tapas en 2014 que se alargará hasta el domingo 18

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  • Cartel anunciador.

Desde el nombre hasta su historia, Zahara de los Atunes  siempre ha estado ligada al milenario mundo de las almadrabas. Siempre mirando al océano que baña sus orillas y que entremezcla sus aguas con el río Cachón, siempre sonriente ante un horizonte privilegiado, siempre abierta a todo tipo de culturas y a todo tipo de viajeros que desde tiempos ancestrales de esta esquina de enamoraron perdidamente. Igual ocurre hoy, pues no hay turista que nos visite y que no regrese.

Sencilla, bella y luminosa, Zahara de los Atunes dibuja una curva perfecta en el litoral gaditano. Sus casas de blanquecina tez se regocijan al saberse privilegiadas dentro de un entorno de ensueño, con playas de fina arena dorada y el Parque Natural del Estrecho acechando desde el cercano Cabo Camarinal. Por no hablar de la luz, de tanta luz con la que Zahara de los Atunes es obsequiada prácticamente todos los días del año gracias a la infinita generosidad del cielo, viento y sol que cubren los días de sus habitantes, colaborando con una hospitalidad digna de los mejores palacios.  Luz, gastronomía, playas, parajes naturales de ensueño, cultura, vida para los que aman el día, vida para los que aman la noche, todo se congrega alrededor de un pueblo cuya historia está reflejada en cada una de las piedras que ayudaron a construir el Castillo de la Chanca, también conocido como el Palacio de las Pilas, el Castillo de Jadraza o Palacio Real de la Almadraba.

Zahara de los Atunes quizás sea uno de los pueblos más bellos del litoral español, y de eso el turista se percata nada más pisar sus calles para adentrarse en sus mágicos callejones y plazuelas. Todo un enjambre de recovecos repletos de vida que conducen, de una u otra forma, al mar, a la playa, razón de ser de todo el pueblo. Y del mar sacan lo mejor de sí, su forma de vida, la de ahora y la de antes, pero también la del futuro, puesto que Zahara ha sabido siempre conservar una identidad labrada en salitre, manteniendo lo mejor de su pasado para posicionarse en el presente como uno de los lugares con mayor futuro.

Y dentro de su cultura, de su gastronomía, de su historia, aparece el atún rojo de almadraba como bandera, como protagonista absoluto sobre el que gira el cúmulo de bondades que nos regala esta más que maravillosa localidad gaditana. Cuna de las almadrabas, ‘lugar donde se golpea o lucha’ para pescar el oro rojo con la paciencia de quien sabe esperar y con la picaresca de la más que ilustres fregonas. Los atunes en su migración desde el Círculo Polar Ártico hasta el Mar Mediterráneo, pasan por el Estrecho de Gibraltar, y aquí dejan parte de su existencia para convertirse en manjares, en exquisitos platos, algunos tradicionales, otros innovadores, pero todos se pueden degustar en esta tierra.

Y aquí es donde los bares, restaurantes, donde los cocineros que en Zahara de los Atunes se hallan, realizan su particular alquimia gracias a la bondad legendaria de la mar. El centro de esta piedra filosofal no esto que el atún rojo de almadraba, al que Zahara de los Atunes rinde su particular y espectacular homenaje cada mes de mayo, aunque se pueda saborear prácticamente todo el año. Hablamos de su Ruta del Atún, que este año cumple su sexta edición y que nació gracias a una iniciativa, muy acertada, de la Asociación de comerciantes de Zahara de los Atunes.

Y como adelanto, solo el nombre de varias de las tapas que entran a concurso: Habanito de Atún Rojo, Atunalidad, Delicia de Atún, Atún Tropical, Sinfonía de Atún, Atún de Pata Negra, Atún al Infierno, Sueño con Atún, y un largo etcétera que tendrá que conocer y probar el propio lector, pues aunque nadie duda de la fuerza de las palabras, para saborear el culto que rinde Zahara al atún de almadraba, no hay nada mejor que acercarse a sus bares y restaurantes, pedir sus tapas y platos y comenzar a disfrutar, a degustar el sabor de la historia de todo un pueblo hecho arte culinario.

Con la mano en el corazón y en el estómago, si os gusta el atún de almadraba, ni se lo piensen, vengan a Zahara de los Atunes, y si es en mayo, del 13 al 18, pues mejor que mejor.

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