Un año más, este 19 de noviembre, se celebra el Día Mundial del Retrete con la intención de crear conciencia sobre los 4.200 millones de personas que no disponen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura. Es imprescindible dar una respuesta a la crisis mundial de saneamiento adoptando medidas que garanticen la disponibilidad de agua y saneamiento para toda la población de aquí a 2030, tal y como se recoge en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6. Hoy más que nunca este objetivo es apremiante y todas las personas deben contar con un saneamiento sostenible, además de agua potable y las instalaciones precisas para lavarse las manos, para proteger la salud y detener la propagación de enfermedades infecciosas mortales como COVID-19, cólera y tifoideas.

Emasesa se suma a este día, que destaca este año como tema la importancia del «Saneamiento sostenible y el cambio climático» recordando la necesidad de arrojar tanto las toallitas como las mascarillas al cubo, y no al inodoro, para evitar los atascos que se producen, tanto en las redes de alcantarillado como en las estaciones de bombeo y estaciones depuradoras de aguas residuales por estas prácticas.

El cambio climático sigue avanzando y las inundaciones, sequías y aumento del nivel del mar amenazan seriamente los sistemas de saneamiento. Las inundaciones pueden contaminar los pozos utilizados para el agua potable o pueden dañar los inodoros y esparcir los desechos humanos a las comunidades y cultivos alimentarios, causando enfermedades crónicas y mortales.

 

Menos avisos de atascos en los últimos años

El los últimos cinco años, el número de avisos de atascos en Sevilla y las poblaciones gestionadas por Emasesa en el área metropolitana ha ido disminuyendo de 1.504 en 2015 a 1.193 el pasado año, datos que responden a los programas continuos de limpieza preventiva de las redes y a la concienciación de los ciudadanos para evitar mascarillas y toallitas en los inodoros.



El impacto de las toallitas en las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR)

Se calcula que un 70% del cribado de residuos retirados en las EDAR corresponde a toallitas, y no se aprecia en los últimos años una clara reducción de estos residuos desde 2016 como se puede comprobar en el cuadro adjunto.

 

Las incidencias más destacadas

En las estaciones depuradoras de aguas residuales tras los primeros episodios de lluvias en otoño y primavera, destacan las incidencias por atascos en bombeos de elevación y pretratamiento, fundamentalmente debido a las toallitas de limpieza que forma un residuo macizo que no solo impide la retirada del residuo, sino que, en ocasiones, necesita de la parada del proceso y (en las peores circunstancias, lluvia y aumento de residuos) para su limpieza manual requiere de la participación urgente de hasta 4-5 operarios.



En las estaciones de bombeo de aguas residuales (EBAR) en general se han producido atascos en los equipos de rejas, bombas de elevación, medidores de nivel y conducciones. Provocando altos costes de reparación y mantenimiento, además de menor disponibilidad de capacidad en las distintas instalaciones.

Para mejorar el funcionamiento de estas estaciones se han sustituido rejas de desbaste para la retirada de este tipo de residuos con un presupuesto total de 1 millón de euros en:

• EDAR COPERO: 2 rejas en la obra de llegada y 6 rejas en pretratamiento, instaladas en los años 2011 y 2012
• EDAR TABLADA: 1 reja en la obra de llegada y 6 rejas en pretratamiento, instaladas en los años 2013 y 2017
• EDAR SAN JERÓNIMO: 1 reja en la obra de llegada y 3 rejas en pretratamiento, instaladas en los años 2013 y 2015

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