Los sevillistas se trasladan a una ciudad que les trae un gran recuerdo, pues fue en Glasgow donde conquistaron su segunda Copa de la UEFA en 2007.
En esta ocasión, el conjunto andaluz cambia el Hampden Park por Ibrox Park, la casa del Rangers, un estadio de cincuenta mil espectadores que se llenará con enfervorizados seguidores en apoyo del conjunto británico.
El equipo que entrena el escocés Walter Smith sacó un valioso punto en la primera jornada de la Champions en el campo del Stuttgart alemán, donde se sobrepuso al 1-0 con un tanto de Madjid Bougherra, por lo que ahora espera hacer bueno ese resultado con la victoria ante el Sevilla, pues tradicionalmente el verdadero poderío escocés siempre se destaca en los partidos como local.
Para este choque, el Rangers cuenta con las bajas por lesión del defensa Kirk Broadfoot, el centrocampista Maurice Edu y el delantero Kyle Lafferty, mientras que están algo mermados dos defensas, Steven Smith y Sasa Papac.
La formación de Walter Smith, que tienen en su plantilla al delantero español Nacho Novo, se presenta en este partido después de no pasar el pasado sábado del empate a cero en el Ibrox Park ante el Aberdeen.
Los sevillistas tiene como mal recuerdo del feudo del Rangers la única vez que se midieron a los escoceses en una competición europea, fue en la Recopa de la campaña 1962-63 y salieron derrotados por 4-0, por lo que el 2-0 de la vuelta en el Sánchez Pizjuán no le valió para evitar la eliminación.
Para este choque, el equipo viaja con las bajas de sus cuatro argentinos en la plantilla, el defensa Federico Fazio, los centrocampistas Diego Perotti y Aldo Duscher y el delantero Lautaro Acosta, todos con distintas dolencias y que se quedan en Sevilla junto al delantero Chevantón y el extremo De Mul, por decisión técnica.